El femicidio de María S., de 68 años ocurrió el 28 de septiembre de 2019 en Pelileo, parroquia Benítez en el barrio Bellavista
Después de casi un año del crimen, Ángel Bolívar L. fue declarado como culpable de esta muerte.
El Tribunal de Garantías Penales de Tungurahua lo sentenció a una condena atenuada ya que después de las pruebas psicológicas se determinó que tiene problemas mentales. El acusado deberá permanecer en prisión cuatro años y diez meses.
También tiene que pagar una reparación integral de 20 mil dólares a favor de la familia de la víctima.
En la audiencia de juzgamiento, el fiscal de Pelileo, David Suárez, demostró ante el Tribunal la responsabilidad de Ángel. Presentó pruebas testimoniales, documentales y periciales, entre estas: el parte policial, los informes de reconocimiento del lugar de los hechos y de evidencias.
Dentro de las pruebas hubo una barra metálica con la cual el femicida habría golpeado a la mujer. Además estaba su ropa ensangrentada.
Según la autopsia médicolegal la muerte se dio por varios traumatismos craneales.
Antecedentes
La víctima tenía discapacidad de lenguaje y vivía con Ángel, mantuvieron una relación sentimental por varios años.
Una nieta de Ángel fue a fumigar los sembríos de tomates el 28 de septiembre, al ver que su abuelo no salía de la casa intentó entrar junto a su esposo pero la puerta estaba atrancada con una barra de metal.
Minutos después ingresaron y encontraron a María tendida en el suelo con varios golpes y al hombre inconsciente.
Al lugar acudieron investigadores de la Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestro de la Policía Nacional (Dinased), la Policía Judicial de Tungurahua, quienes comprobaron que la mujer ya no tenía signos vitales.
Al inicio se presumía que una tercera persona habría cometido el crimen pero en las investigaciones se reveló que María tenía cinco heridas traspuestas (una sobre otra) en el cráneo, en el cuello y lesiones de defensa en sus brazos.
El femicida intentó incendiar la casa, pero su condición física no se lo permitió. (APQ)
EL DATO
Los testimonios de la nieta del femicida fueron importantes en la investigación.