Todos los gobiernos totalitarios se creen grandes inversionistas y empresarios y que ellos son los más eficientes administradores. En la AGD vimos que miles de empresas, bienes e inversiones fueron misteriosamente adjudicadas, administradas como haciendas y de mano en mano, como dice un adagio popular, se perdieron hasta los elefantes.
Nadie auditó con responsabilidad esta inmensa riqueza que debió servir para pagar a los perjudicados y para que el Estado recupere los valores adeudados. El primo famoso ‘digitalizó’ los archivos y todo este patrimonio se esfumó. Los saldos de mano en mano terminaron transferidos al Banco Central y al pozo ciego de Inmobiliar.
El Estado acaparador así mismo absorbió empresas que estaban en otros sectores como la militar, la policial, compañías de aviación, consorcios informáticos, medios de comunicación propios, incautados y comprados y ante la tragedia de que casi todas quebraban, algún sabio creó una nueva entelequia llamada ‘empresas públicas’.
Es por esto que resulta realmente intolerable que existiendo varios organismos públicos que son los llamados a vigilarlas y controlarlas se ha dispuesto que cada empresa en forma individual tenga ya la facultad de decidir quién las audite como si se trataran de patrimonios particulares.
Es indispensable anotar que estas aventuras de la cuales existen muchos nuevos ricos, según el propio Banco Central, solo en el año 2016 el déficit de estas andanzas empresariales costó al pobre pueblo ecuatoriano la bicoca de 1.575.6 millones, casi 1,6 billones. ¿Podrá seguir en época de crisis tanto despilfarro e ineficiencia o es un nuevo mecanismo de la viveza criolla?
Frases
Estoy a favor de la verdad, la diga quien la diga. Estoy a favor de la justicia, a favor o en contra de quien sea”.
Malcolm X
Activista político estadounidense (1925-1965)
La justicia es el pan del pueblo; siempre está hambriento de ella”.
René de Chateaubriand
Diplomático y escritor francés (1768-1848)