El Presidente de Rusia firmó una ley que le permitirá postularse dos veces más al cargo.
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, promulgó este lunes, 5 de abril de 2021, una Ley que le permitirá permanecer en el Kremlin hasta 2036, al darle el derecho a presentarse a la reelección en dos ocasiones más.
La firma de Putin se produce después de que la Duma (Cámara Baja) y el Consejo de la Federación o Senado aprobaran la ley de manera formal. El documento se publicó en el portal oficial ruso de información legal este 5 de abril.
Enmienda constitucional
La normativa desarrolla una enmienda a la Constitución, adoptada en un plebiscito el pasado 1 de julio de 2020, junto a otros cambios en la Carta Magna.
Una de las modificaciones constitucionales, permite al jefe del Kremlin, que llegó al poder en 2000, presentarse a la reelección en dos ocasiones más, en 2024 y 2030.
La nueva ley precisa que la misma persona no puede llegar a ocupar el cargo de Presidente durante más de dos mandatos, al tiempo que no impide al político «que haya ocupado u ocupa el cargo de Presidente de la Federación Rusa participar como candidato en las elecciones presidenciales en el momento de la entrada en vigor de la modificación».
La norma confirma además que en el futuro sólo podrán ser candidatos a la presidencia rusa aquellos ciudadanos mayores de 35 años que hayan vivido de manera permanente en este país no menos de 25 años.
Los aspirantes al Kremlin no podrán poseer doble nacionalidad o haber tenido pasaporte de otro país en el pasado. EFE
Putin podrá presentarse a la reelección en dos ocasiones más, en 2024 y 2030.
Reacciones de la oposición
El partido opositor ruso Yábloko señaló que la reforma constitucional del presidente, Vladímir Putin, que permitirá al mandatario permanecer en el Kremlin hasta 2036, «marcó formalmente el fin del período de modernización postsoviética».
«La oposición debe obligar a las autoridades a dialogar», declaró el líder de esta formación liberal, Grigori Yavlinski, al tiempo de anunciar una reforma partidista con el fin de conservar el «núcleo político» de la oposición democrática y enfrentar al Estado mafioso ruso.
«Ahora en la Carta Magna se ha fijado la inamovilidad del poder personal de Vladímir Putin, y las bases de un Estado corporativo, mafioso y autoritario”, dijo Yavlinski, quien lamentó que este «golpe anticonstitucional» no es objeto de discusión a nivel social, agregando que de hecho «la sociedad todavía no es consciente de lo que sucedió».