Digitalización, la cura contra la congestión judicial en Latinoamérica

Modernización. El nivel de confianza en el sistema judicial cayó en 61%. En la imagen, presos de la cárcel de Villahermosa, en Cali.
Modernización. El nivel de confianza en el sistema judicial cayó en 61%. En la imagen, presos de la cárcel de Villahermosa, en Cali.

Los procesos represados en los países de la región hacen que sea urgente una mayor digitalización en el sector.

REDACCIÓN AMÉRICA

Despachos colapsados, jueces con 900 casos por leer y personas pendientes de que se les resuelva su situación judicial son algunos de los ejemplos de la congestión judicial en América Latina, una situación que ha obligado a países como México o Colombia a promover la digitalización.

En algunas naciones de la región, un proceso judicial tarda en promedio más de 600 días en resolverse, mientras que en los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo (OCDE) el promedio es de 240 días, según datos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

En Colombia, por ejemplo, los procesos inician pero se demoran entre 5 a 4 años, “lo que hace que la congestión sea un gran problema”, explicó el abogado penalista Milton Perdomo, director de Derechos Humanos de la Fundación Retorno a la Libertad.

La descongestión judicial es uno de los pedidos constantes del sector público y privado a los gobiernos, así como que se asignen recursos para reducir los costes y la duración de los procedimientos.

Según el índice ‘Rule of Law’ de 2022, de la organización World Justice Project y que mide el Estado de derecho y la percepción de Justicia, en la región el nivel de confianza en el sistema judicial cayó en 61%, por las continuas demoras, una débil aplicación de la ley y la discriminación.

Iniciativas de cambio

“En varios Gobiernos de la región se están desarrollando iniciativas muy oportunas, sobre todo de alta transformación digital”, señaló José Fernando Quintero, director regional de Administraciones Públicas de Minsait, una compañía de la firma española Indra que apuesta por la transformación y la innovación para mejorar los trámites, procesos o diligencias a través de la digitalización.

Laurence Pantin, coordinadora del programa de Transparencia en la Justicia de México Evalúa, confirma que se han dado grandes pasos con la digitalización, en un país donde existen 33 poderes judiciales locales y uno federal.

“Muchos poderes judiciales que no contaban con tecnologías hicieron un esfuerzo para ampliar lo que ya tenían (…) y ahora podemos ver cómo algunos están a la vanguardia y otros están muy rezagados”, sostuvo Pantin. El estado de Nuevo León es un ejemplo de la digitalización, con audiencias virtuales o en modo híbrido.

Modernización digital es una necesidad

El director regional de Administraciones Públicas de Minsait, José Fernando Quintero, señaló que es hora de que la región cuente con una “modernización eficaz de sus sistemas judiciales”, pues la falta de recursos, la burocracia o la corrupción dificultan el camino a la digitalización.

Entre los desarrollos de Minsait está una justicia digital cognitiva, que reconoce documentos con inteligencia artificial, en donde miles de portafolios se reducen a documentos electrónicos.

Un maletín virtual para el juez en el que “puede buscar información más rápido», por ejemplo expedientes, dejando atrás la imagen del escritorio con miles de folios por leer.

Audiencias virtuales, expedientes electrónicos, sistemas centralizados y la interconexión de juzgados son temas que se logran con la digitalización de la justicia.