‘Don Simba’, un ejemplo para la juventud riosense

Segundo Simba
Segundo Simba impone condiciones en cada una de sus participaciones.

Segundo Simba nació en el cantón Pujilí, provincia de Cotopaxi, el 21 de junio de 1932, pero tiene 70 años radicado en Quevedo.

QUEVEDO. El veterano atleta Segundo Simba Córdova es una de las figuras indiscutibles del deporte riosense. Su carisma que conjuga con su edad y elocuencia, hacen de este deportista un ganador, sobre todo cuando lleva consigo la cantidad de medallas y trofeos en las competencias atléticas en las que ha participado.

‘Don Simba’, como es llamado cariñosamente por sus amigos y compañeros de deporte, nació en el cantón Pujilí, provincia de Cotopaxi, el 21 de junio de 1932. Es decir, este año cumplirá 90 años, de los cuales 70 ha vivido en Quevedo.

Son innumerables las competiciones en las que Simba ha dejado muy en claro que la edad no es ningún impedimento para ejercitarse y mantenerse en forma.

Una de las últimas competencias en las que Simba apareció fue la Quevedo 4k, organizada por la Prefectura de Los Ríos. Desde muy temprano por la mañana, estuvo en el punto de partida de la carrera, ubicado en el parqueadero del Malecón de Quevedo, en donde le fue asignado el número 242 y le entregaron su camiseta y el chip correspondiente.

Segundo Simba
En su última competencia de 4 kilómetros hizo un tiempo de 30 minutos.

Desde ese punto, los organizadores permitieron que salga con varios minutos de anticipación, lo cual fue aplaudido tanto por los competidores como por los espectadores. Simba marcó un tiempo de 30 minutos en esta competencia. En el acto de premiación, recibió un reconocimiento especial.

Luchó en Quevedo

Su juventud la vivió en su tierra natal. A los 20 años de edad se radicó en Quevedo donde formó su propia familia, en la que tiene 12 hijos.

“Llegué a Quevedo en 1952. Era un pueblo pequeño, con unas cuantas casas fuera del actual centro de la ciudad, donde todo mundo vivía en casas de caña y madera”, cuenta Simba, quien asegura que la ciudad ya demostraba ser pujante y crecía rápidamente.

Empezó a trabajar como vendedor de agua, en vista de que Quevedo no tenía de un servicio de abastecimiento del líquido vital, y él cargaba cargaba burros con pequeños tanquecitos de agua, que extraía del río, que era muy limpio, según cuenta.

“Con el paso de los años trabajé en la agricultura y hasta fui albañil. Como atleta empecé a los 75 años de edad, hace unos 11 años. Ya estaba retirado de cualquier actividad laboral por mi edad y porque ahora mis hijos me ayudaban. Sin embargo, no quería quedarme en la casa sin hacer nada”, explica.

Empieza nueva etapa

Pese a que muchos creen que Simba fue atleta durante toda su vida, en realidad empezó a los 75 años de edad, hace unos 15 años.

“Mi primera carrera fue en el año 2007, en la 16k de la Marina de Guayaquil, a la cual recuerdo como una experiencia única. Me sentí algo mal porque me dejaron atrás, al último desde el inicio, pero me destaqué en la carrera y quedé en el segundo lugar en mi categoría”, recuerda.

Simba dice que aprendió que no es campeón el que llega primero, sino el que vence sus fuerzas y llega a la meta.

“Yo, a mi edad aún estoy en óptimas condiciones físicas para seguir compitiendo”, expone el longevo deportista, quien entrena todos los días recorriendo varios lugares de la ciudad, como la Ruta del Río, el Grupo de Fuerzas Especiales, anillo vial, entre otros lugares. (DLH)