Universidades en línea: perfil del nuevo estudiante

EXPERTA. Eva Asensio del Arco, docente investigadora y articulista.

Las nuevas tecnologías en el campo de la comunicación y consumo de información han provocado un cambio radical en los procesos de enseñanza y aprendizaje. La pandemia aceleró la digitalización de las cosas y significó un reto para la academia, puesto que se debían implementar las mejores alternativas que se adapten al contexto y a las necesidades educativas.

Frente a este escenario, se plantea el siguiente tema: “Cada vez hay más jóvenes, críticos, exigentes y volátiles: ¿Cuál es el nuevo perfil del estudiante de las universidades en línea a nivel mundial?”.

Para dar respuesta a la interrogante, dialogamos con Eva Asensio del Arco, quien se desempeña como docente en la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), es vicedecana de la Facultad de Empresa y Comunicación y directora de Innovación Académica del grupo Proeduca.

La experta menciona que los jóvenes que están familiarizados con la tecnología y que tienen acceso a material en diferentes formatos, son cada vez más exigentes, por ello, los alumnos buscan metodologías activas que les posibiliten interactuar y adquirir conocimientos que aporten valor.

Los nuevos estudiantes son críticos con las metodologías tradicionales, ya que nos les interesa ser receptores de información. La juventud desea aprender a través de un proceso experiencial y competencial, que le permita aplicar los contenidos previamente analizados; esto les dará la oportunidad de involucrarse en el ámbito laboral en el menor tiempo posible.

Los actuales jóvenes son diferentes a otras generaciones, puesto que están interconectados con el mundo y realizan diferentes actividades a través de internet. Asensio del Arco comenta que la juventud es crítica con la mayoría de las cosas que observa en su cotidianidad; esta constante se repite en el ámbito educativo, puesto que necesitan ser escuchados y requieren de acciones concretas de mejora continua.

Manifiesta que las tasas de abandono universitario son elevadas, ya que no siempre los alumnos están de acuerdo con las metodologías tradicionales que se dictan: “si no conectan, se marchan, porque también son muy autodidactas”, agrega.

Los profesores de la actualidad deben estar en constante formación para que puedan conectar adecuadamente con los alumnos, asimismo, deben actualizarse en conocimientos, con el fin de que logren suplir las dudas de los centennials o generación Z.

La vicedecana señala que, con la llegada de la pandemia, la transformación en el sistema escolar se aceleró: “la COVID-19 ha apresurado la digitalización de todos los sectores y también ha provocado una aceleración en el ámbito educativo”.

A decir de Eva, el confinamiento permite evidenciar que la educación online puede ser de alta calidad y satisface las expectativas del alumno. En el caso particular de la UNIR, emplean una metodología de Impact Learning, con el objetivo de que los estudiantes adquieran experiencias internacionales y sientan interés en las temáticas de estudio.

“La formación online da más posibilidades que la formación presencial”, indica la docente, puesto que se pueden implementar entornos tecnológicos de alto rendimiento que generen óptimas experiencias de aprendizaje.

 

EL DATO

Según la Senescyt, en el 2019 el 26 % de alumnos inscritos en universidades públicas o privadas, abandonaron su carrera en los primeros semestres.