El prefecto de Carchi, Julio Robles, analiza sus primeros seis meses en el cargo, al que llegó con más del 60% de la votación. Además, enumera las obras que vienen.
CARCHI. – En medio de una atareada agenda, que aparte de sus actividades diarias se intensificó en el presente mes por los diversos eventos programados para celebrar los 143 años de provincialización de Carchi, el prefecto Julio Robles recibió a un equipo de LA HORA.
El análisis de sus primeros seis meses al frente del Gobierno Provincial y sus expectativas en un cargo que ocupa por primera vez, pues fue Concejal y luego Alcalde de Tulcán por dos periodos, fueron los temas principales abordados; así como las propuestas y necesidades provinciales de cara a un nuevo Gobierno Nacional. Aquí la entrevista.
¿Cómo encontró a la Prefectura, que tuvo a su última autoridad 10 años en el cargo, pero más de 20 con el mismo partido político?
Encontramos una institución que venía de una etapa un tanto larga. Una administración, políticamente hablando, que duró cerca de 24 años, donde nosotros, en base a nuestro modelo de propuesta, que recibió gracias a Dios el apoyo popular, estamos haciendo algunos cambios estructurales, dando prioridades a otros temas.
Nosotros no hemos calificado a la anterior administración y no lo vamos a hacer, pero sí decir que estamos poniendo nuestro propio sello, focalizando nuestros esfuerzos en los temas de nuestras competencias, como el tema vial rural, donde antes se trabajaba con cinco frentes en mantenimiento de vías rurales, pero nosotros hoy estamos con 16 frentes de trabajo. Hemos logrado hacer, en casi seis meses, el mantenimiento de aproximadamente 700 kilómetros, de los 1.800, aproximadamente, que son de nuestra competencia.
Usted fue alcalde por dos períodos consecutivos, ¿cómo ha sido el cambio de manejar la capital de la provincia a un Gobierno Provincial?
Las dos son experiencias muy intensas, con competencias distintas. La Municipalidad siempre tendrá un recuerdo muy importante, porque tuve el honor de ser primero Concejal, cuando tenía 24 años, luego Alcalde desde los 27 a los 37 años, donde pudimos también hacer y dejar algunos algunos recuerdos importantes.
Hoy, en cambio, en la Prefectura, estamos enfocados en otras competencias, como el tema vía rural, el tema de riego, el tema ambiental, todo lo concerniente a la parte productiva, donde tenemos algunas iniciativas. Una de ellas, por ejemplo, que vamos a lanzar este 24 de noviembre de 2023, es precisamente la Feria Internacional Carchi 2024.
Es decir, en este noviembre vamos a presentar la feria, pero tendremos todo el año para organizar una feria potente, de nivel, que tenga actividades diversas y que sea el mejor pretexto, en el buen sentido, para trabajar, para el comercio, para fortalecer la parte productiva, la parte tecnológica.
Entonces son experiencias distintas, pero las dos muy apasionantes, para los que al menos, como en mi caso, me apasiona la actividad política y pública.
¿Cuáles serán los ejes principales de su gestión en la Prefectura?
La producción, con la parte económica. Es decir, a veces pensamos que la parte productiva es solamente lo rural, y no lo digo como minimizando, pero también es la parte de la dinámica económica comercial de lo urbano. Así lo entendemos, por lo que ese es un eje que para nosotros es fundamental.
El tema ambiental, donde, por ejemplo, estamos pretendiendo la creación de un fondo del agua y la compra de cerca de 2.000 hectáreas de páramo como parte de un proyecto inicial de manejo y mantenimiento de fuentes de agua.
A nivel vial rural, nosotros nos comprometimos en asfaltar 200 km de nuevas vías rurales, que para nuestro tamaño institucional es una iniciativa realmente ambiciosa en lo positivo
Para citar un ejemplo, la anterior administración asfaltó entre 70 y 73 km en una gestión, pero nuestra meta es 200 km. Dentro de ellas hay una vía que nosotros la hemos denominado la vía de la Unidad Provincial, que busca unir los cantones de Mira y Espejo a Tulcán, con esta carretera que pasa por las lagunas del Voladero y otras cosas.
A nivel de riego, que es otro de los ejes fuertes para nosotros, tenemos el tema de mejoramientos y construcciones de nuevos sistemas de riego, porque nadie puede hablar de mejorar o apoyar la producción si no está el agua de por medio. Pero eso también implica aprovechar mejor el recurso agua, porque a veces se tiene, por ejemplo, un canal de agua donde solo el hecho de la filtración ya es una pérdida, entonces acá nosotros aspiramos al buen uso del recurso agua.
Y algo que para nosotros es importante también es la parte social. Hoy mismo estamos por lanzar un proyecto que se llama ‘Carchi te cuida mujer’, que pretende apoyar a 23.000 mujeres con servicios de salud en nuestra provincia.
Queremos brindar un servicio de salud en el que, con 1 dólar, por ejemplo, podamos tener acceso a una consulta con un médico general y medicina genérica gratuita. Con 3 dólares, se pueda hacer exámenes de laboratorio, un papanicolau, una ecografía; que con 7 dólares se puede hacer una mamografía, por ejemplo, que son exámenes que superan los 40 o 50 dólares.
Y hay un eje transversal que para nosotros es clave, que es la coyuntura política local y nacional. Consideramos que el Carchi debe estar también con la visibilidad que corresponde. Hoy está la Prefectura del Carchi, el prefecto precisamente, presidiendo la Mancomunidad del Norte, de Carchi, Imbabura, Sucumbios y Esmeraldas. Y también como vicepresidente del Congope a nivel nacional, que son espacios que para nosotros como parte de gestión son importantes.
¿Cómo está el tema de presupuesto para cubrir estos ejes?
Jamás va a haber recursos suficientes para todo lo que hay que hacer. Jamás. Hoy mismo estamos con ciertas limitaciones en cuanto a liquidez, pero esto es como la economía familiar: cuando hay un poquito más de recursos se puede generar algún otro tipo de inversiones, pero cuando hay menos recursos hay que saber desarrollar el sentido de la priorización. Todo es importante, pero hay cosas que son urgentes.
Estamos generando contrapartes con otras instituciones para poder alargarlo o estirarlo, si cabe el término, al presupuesto. Hoy mismo estuvimos, por ejemplo, con el alcalde de Montúfar, donde vamos a poder hacer un ‘X’ número de kilómetros de asfalto, donde el 70% lo pone la Prefectura y el 30% lo pone la Municipalidad. Y así en toda la provincia, que nos ayuda a estirar los recursos.
Otra forma es, en el caso de los asfaltos, por ejemplo, como signo también de igualdad, de equidad y de solidaridad entre todos, que si un camino tiene 3 km de asfalto, vamos año a año haciendo 1 km, lo que nos va a permitir no atender, en el ejemplo que pongo, a una comunidad en 3 km, sino a tres comunidades de a 1 kilómetro. Eso también nos va a permitir hacer notar que aquí no hay preferencia para alguien, si no preferencia para todos.
¿Cuál es el promedio presupuestario que manejan actualmente?
Nosotros tenemos un promedio presupuestario de aproximadamente $1,5 millones mensuales, para que tenga una referencia, dentro del modelo de equidad.
¿Cómo afecta a la gestión provincial el cambio de autoridades nacionales?
El cambio de todo gobierno, en cualquier nivel, sea nacional, provincial, municipal, parroquial, siempre trae consecuencias propias. Y no estoy hablando de buena o mala fe, o buena o mala voluntad, sino con absoluta objetividad. Siempre trae sus retrasos, sus incertidumbres. Citando un caso: usted presenta un proyecto, pero cambia la autoridad, por lo que tiene que primero hacer el lobby para poder conocer a la autoridad; segundo, explicar el proyecto que ya lo presentó; tercero, tener congruencia con el Plan Nacional que ese gobierno lo está impulsando. En ninguna parte de lo que he citado está la voluntad, porque son temas normales, naturales.
Pero también trae a veces expectativas, porque a veces como que se tiene cierta sintonía con el gobierno que pueda llegar, porque priorizan ciertos temas que se asemejan a los que uno está impulsando.
Precisamente, ¿qué expectativas tiene del nuevo gobierno?
Nosotros pensamos que es un error ver a este gobierno como de transición, como muchos sectores lo ven. Lo digo con respeto, porque no es un gobierno de transición. Más bien dicho, no debería ser adoptado como un gobierno de transición, porque tiene la posibilidad de iniciar procesos que le puedan, con continuidad o no en el gobierno, aportar al país.
En lo personal he planteado de que se cree, por ejemplo, una Secretaría, con rango de Ministerio, que sea enfocada a ver e impulsar proyectos de desarrollo de fronteras, que dicho sea de paso está en la Constitución, está en la ley, donde somos 10 provincias fronterizas, nueve continentales y una insular.
Además, yo tuve la oportunidad, junto a los señores alcaldes de la provincia, de reunirnos con el hoy presidente electo Daniel Noboa.
El Carchi, nosotros, estamos proponiéndole el proyecto geotérmico Chiles – Tulcán, que generaría 138 MW, tomando en cuenta que las provincias de Carchi, Imbabura, Esmeraldas y Sucumbíos, de la frontera norte, consumen 130 MW.
Esto bordea los 300 millones de dólares. Es generación geotérmica de energía, que para mi modesto criterio sería un antes y un después para nuestra provincia. Al menos en nuestro contexto, imagínense lo que sería liberar la necesidad de demanda de energía de la zona norte.
Requerimos 10 millones de dólares para el estudio definitivo y completo, para luego buscar inversionistas, que los hay. Yo estoy seguro que en este año de lo que viene del gobierno es imposible hacer realidad este proyecto, pero el primer paso que necesitamos es 10 millones de dólares para contratar el estudio, porque le entregamos un anteproyecto al presidente Noboa.
Ese es un proyecto estratégico para nosotros. Claro que tenemos necesidades de todo valor, que cueste 10.000, 100.000 o 1 millón de dólares y más, pero hay proyectos que son estratégicos que se convierten en motores dinamizadores de desarrollo.
Si usted hace una vía, no solo es el tema de la vía, es todo lo que repercute esa vía. Entonces acá pasa eso, que lo cito por la importancia, como un proyecto puntual, pero de allí, por ejemplo, una zona especial de desarrollo es necesaria para nuestra provincia.
Hay proyectos que no requieren de plata, de asignación presupuestaria, sino de voluntad política y de coyuntura política, porque el presidente puede proponer zonas especiales, pero quien lo aprueba es la Asamblea, donde se necesita coyuntura política, entre otras circunstancias más.
Le hemos planteado temas varios, como en la parte productiva, donde debe haber una política clara del uso, consumo y pago de la leche.
Estos son solo algunos ejemplos de lo que hemos hablado a nivel productivo, a nivel vial, a nivel estratégico.
¿Cuál espera que sea el legado de Julio Robles tras terminar la administración en la Prefectura?
Lo único que yo aspiro para estos tres años y medio que nos restan es, primero, dejar sentado bases sólidas de una verdadera unidad provincial. A veces es fácil decir, pero si uno se pone a analizar, es lo que menos hacemos incluso como país. Cada vez tenemos intereses más bipolares.
Más que cualquier número de adoquinados o de obras de infraestructura, yo aspiro construir unidad provincial y que las nuevas autoridades que puedan venir y van a venir, que serán muchísimo mejor que este humilde servidor, lo sigan fortaleciendo.
Y lo otro es cumplir mi palabra. Lo que más me preocupa es no desilusionar a quienes confiaron en mí. Yo he tenido el honor y la bendición gracias a Dios de tener porcentualmente el más alto porcentaje a nivel nacional de prefectos, con 61,3% de votación, por lo que aspiro cumplirle, al menos, a ese 61%, si no puedo al 100%, porque uno tiene que servirle a todos. Espero que cuando termine los cuatro años la gente crea que valió la pena darme la oportunidad.
Y ya en lo personal, que mi conciencia quede en paz, porque uno puede a todo mundo tratar de engañarle, pero la conciencia es la conciencia. Yo tengo un apellido que también debo cuidar. Hoy en este despacho tengo el escritorio que mi padre usó hace 30 años cuando fue prefecto. Tuvimos la posibilidad de recuperarlo y para mí es simbólico, porque en ese escritorio no puede firmarse nada malo, ya que eso es un tema personal. Son símbolos que uno tiene precisamente para no defraudar ni a los propios ni a los ajenos.
Robles, un político de cepa
Julio César Robles Guevara nació el 14 de septiembre de 1981. Es Ingeniero Comercial en Productividad y CPA graduado de la Universidad Católica del Ecuador.
Inició su carrera política como Concejal durante el periodo 2007-2009 y posteriormente se desempeñó como Alcalde de Tulcán durante los periodos 2009-2014, cargo para el que fue reelecto para el periodo 2014-2018.
Robles es el presidente fundador del Movimiento Social Conservador, lista 63. En 2017 fue designado como el primer presidente de la Organización Latinoamericana de Ciudades Fronterizas. En 2023 ha sido electo como vicepresidente del Consorcio de Gobiernos Autónomos Provinciales del Ecuador (Congope) y presidente de la Mancomunidad del Norte del Ecuador, conformada por las provincias de Carchi, Imbabura, Esmeraldas y Sucumbíos.
Además, ha sido elegido como vicepresidente del Observatorio de la Zona de Integración Fronteriza Ecuador- Colombia (Ozifec). (FV)