Incendio los deja sin nada

PÉRDIDAS. Un cortocircuito originó el incendio que consumió un inmueble donde vivía una familia y funcionaba un templo evangélico.
PÉRDIDAS. Un cortocircuito originó el incendio que consumió un inmueble donde vivía una familia y funcionaba un templo evangélico.

Tres adultos y dos niños de 3 y 2 años de edad, constan entre las personas que ahora no tienen un techo para dormir.

Eran las 20:00 del lunes, 24 de mayo, cuando un incendio devastó el interior de una vivienda de dos pisos de construcción mixta, que fue adecuada para funcionar como iglesia Evangélica. Junto al templo, también fue afectada otra casa de caña que en cuestión de minutos fueron reducidas a escombros por el fuego. El hecho se registró en la Isla Prado, junto a una cancha de fútbol.

El flagelo que fue causado por un cortocircuito dejó sin hogar y sin sus enseres a una familia de cinco integrantes, quienes vivían en el segundo piso de la casa donde funcionaba la iglesia evangélica, entre ellos constan dos niños, de 2 y 3 años de edad, y tres personas adultas.

Congregados

En el sito estaban congregados unas 30 personas. “Nosotros estábamos aquí cuando comenzó el incendio, pero fue rapidísimo que se prendió todo, porque la casa era de construcción mixta, de inmediato salimos pero lamentablemente no pudimos rescatar nada, todo se perdió en el incendio”, expresó la pastora Lucía García.

Asegura que los bomberos llegaron 45 minutos después de haber inicio el fuego, “gracias a Dios hasta ese momento nadie resultó herido por las llamas porque salimos enseguida del culto”.

El fuego también acabó con el material usado para las reuniones, cortinas, micrófonos, parlantes, ventiladores e incluso la batería de la banda musical de la iglesia.

Damnificada

Entre cenizas se encontraba Santa Campos, quien con lágrimas agradeció a Dios por estar viva con su familia y sus hermanos cristianos. “Es mucho dolor porque hubo sudor y lágrimas en esa iglesia, además perdimos todo lo que con trabajo habíamos tenido en años y lo perdimos en segundos”, se lamentó

Ayuda humanitaria
El olor a humo impregnado que aún no abandonaba el ambiente y las pocas cosas materiales que no se quemaron, reposaban en el exterior de la vivienda incendiada, mientras que la familia afectada se quedó en la calle y con tristeza miraban los escombros de lo que fue su vivienda.
“Hemos perdido todo, nos hemos quedado en la calle y es por eso que solicito que nos ayuden para poder afrontar esta situación, ya que todo lo consumió el fuego”, manifestó Santa Campos, perjudicada.
Las llamas arrasaron con todo lo que estaba a su paso: camas, ropa, televisores, sillas de ruedas, cocina, refrigeradoras, entre otros.
TOME NOTA 
Las personas en ayudar a Lucía García y a Santa Campos pueden llamar al 
09 93 86 07 87- 09 94 30 13 84.
DATO
Hasta el cierre de esta edición, ninguna autoridad del cantón Esmeraldas había visitado la zona del siniestro para brindar su ayuda a los afectados.