Eddy Arrobo Rodríguez
El Estado ecuatoriano requiere de políticas educativas urgentes. Es evidente que el actual sistema educativo muestra un gran deterioro, pues se ha convertido en un sistema rígido, de baja calidad, desigual, con mínima aplicación de las nuevas tecnologías, poca investigación y secuestrado políticamente. De ahí que es trascendental analizar las ofertas educativas de los dos candidatos que disputan la segunda vuelta.
En resumen, Arauz, propone mejorar el sistema de nivelación y admisión para el ingreso a la educación superior; tiene como prioridad la educación de la primera infancia; revisión de modelos pedagógicos para incentivar el pensamiento crítico; fortalecer la educación intercultural bilingüe; mejorar la infraestructura de las Unidades Educativas del Milenio; educación gratuita de calidad; garantizar los derechos de los docentes con una remuneración justa, consolidando sus carreras en base al mérito y desempeño; incluir el aprendizaje de una lengua ancestral; y, restaurar y potenciar el programa de becas y créditos educativos.
De su parte, Lasso, plantea una reforma a la LOES para el libre ingreso universitario, con lo cual se eliminará el respectivo examen de acceso a la educación superior; reabrirá y fortalecerá 900 escuelas rurales dotándolas de tecnología con conectividad a internet; garantiza el desayuno escolar a los estudiantes de las escuelas fiscales; capacitación a los docentes; nuevos programas a nivel de grado y posgrado; programa de educación para estudiantes especiales; reforma a la Ley de Educación Intercultural; Igualar la formación en conservatorios y escuelas de arte con la titulación de bachillerato y títulos superiores.
Es nuestra responsabilidad considerar las propuestas y votar por la mejor opción.