La importancia de la salud mental

Rodrigo Contero Peñafiel
Rodrigo Contero Peñafiel

Rodrigo Contero Peñafiel

Existen depredadores sociales que utilizan el engaño, la violencia, la mentira y el miedo para controlar y manipular a las personas con el único fin de satisfacer sus necesidades personales y de grupo. La mayoría no son detenidos porque no matan ni cometen delitos, pero tienen quien los haga y los defiendan, su disposición debe ser cumplida, caso contrario las amenazas y conflictos serán permanentes. Los depredadores están articulados en la sociedad, por eso el nombre de Psicópatas Integrados.

Estos individuos carecen de todo tipo de razón, emociones y principios, infringen todas las leyes, normas y reglamentos para hacer lo que quieren sin el menor remordimiento. Los encontramos en todos los estratos de la sociedad donde consiguen poder, control y reconocimiento, lo que les da el valor necesario para ser atraídos por la política, puestos directivos en organismos institucionales donde la autoridad es su fortaleza y potestad. Son buenos oradores y hablan de una moralidad que nunca practican; con el auge del internet y las redes sociales aparentan ser dignos y honorables, saben el mal que hacen y persisten en hacerlo, son verdaderos depredadores de la humanidad a pesar de que lo nieguen.

Estos psicópatas son narcisistas, se sienten merecedores de toda admiración y miran a los demás con desprecio, se creen superiores a todos, su relación con el poder les produce un enorme egocentrismo y una idea muy elevada de su imagen, creen ser el centro de la admiración de todos; dan mucha importancia a su oscuro pasado. Unos cuantos asambleístas anteriores y actuales, así lo demuestran, si no les rinden pleitesía reaccionan con rabia, son belicosos y bozalones, saben lo que hacen, por eso crean problemas legales y políticos con el afán de esconder sus ilegalidades. Son mitómanos e introducen algunos aspectos de la realidad para dar mayor credibilidad a sus mentiras.

El país mira con indignación a gente del populismo, el hampa y la corrupción organizada que, con mentiras, chantajes y secretos bien guardados, van creando artimañas para ocultar el fraude, vulgaridad y sumisión al caudillo fingiendo ser perseguidos políticos.