Doctorado en Comunicación

Pablo Escandón Montenegro

¿Para qué sirve hacer un doctorado en Comunicación aquí en Ecuador y en esta coyuntura mediática? ¿Cuáles son los aportes de los estudios de doctorado y de los doctores que trabajan como docentes en las universidades del país?

Para responder a estas dos inquietudes es importante realizar un brevísimo diagnóstico de la situación mediática del país: medios cerrados o reducidos en su plantilla, negocios digitales en crecimiento con mucho detrimento de la información de calidad; instituciones públicas sin transparencia informativa y gobiernos que imponen un relato único; por el otro lado, universidades que no se encuentran entre ellas, mucho menos a sus estudiantes, que como profesionales se emplean de lo que encuentren menos para lo que se prepararon durante más de tres años.

Con este antecedente, responder para qué sirve hacer un doctorado en Comunicación, principalmente para dar solución, desde la investigación social, a estos problemas descritos, pues quienes se forman durante varios años en un doctorado adquieren y mejoran habilidades para dar respuestas innovadoras a los problemas planteados. Esto no quiere decir que con un doctorado la situación cambie como arte de magia; no. Pero construye datos para tomar decisiones, presenta ejemplos y prototipos que bien pueden ser desarrollados por medios, instituciones y universidades.

El aporte de los doctores en comunicación, escasos aún en el país, y que se formaron afuera, es importante, pues ellos deben hacer preguntas de la realidad comunicacional del país y de la región para proponer modelos nuevos, acordes a los receptores y a sus comunidades, respetando sus contextos socioculturales. No como hicieron los doctores que vinieron y se fueron a sus países, tanto como duró una exhalación, y no dejaron escuela.

Hoy más que nunca son necesarios los estudios de investigación en Comunicación y las universidades que apuestan por los doctorados en Comunicación, además, construyen un campo científico propio en constante mutación. Allí está el reto, en no ser obsoletos en cada promoción, sino en dar herramientas y líneas válidas para que la renovación sea constante.

Bienvenido sea el doctorado en Comunicación.