A nadie se le prendió el foco

José Alvear

Retrocedimos en el tiempo. Ya es oficial y, aunque el gobierno trató de negarlo y cubrir el sol con un dedo, estamos en medio de los apagones y una grave crisis en el sector eléctrico. Esta situación pudo evitarse, pero por negligencia y posible corrupción de este gobierno hoy estamos con la luz apagada.

No podemos dejar de  recordar la terrible época del expresidente Sixto Duran Ballén y la ‘Hora Sixto’ que consistía en adelantar una hora del día para ‘ganar luz’ debido a los apagones.

El presidente electo, Daniel Noboa, hereda el cargo con serios problemas considerando que podría recibir en  $0,40 centavos el kilovatio de electricidad,  cuando el promedio de costo era de $0,10 centavos. Todo gracias a la negligencia del ‘vegano’ gobierno de Guillermo Lasso y los funcionarios del Ministerio de Energía, encabezados por el ministro Fernando Santos Alvite y el gerente de CELEC, Gonzalo Uquillas, que han realizado compras de último momento con un aparente sobreprecio.

Revisemos las alternativas que tiene el nuevo gobierno: la primera es aceptar que Ecuador está quebrado y debe ser la empresa privada la que tome acciones y entre en el juego.

Medidas adicionales, aunque parches, están enfocadas en invertir en el mantenimiento de las termoeléctricas existentes para evitar los apagones en lugar de pagarle a Colombia 100 millones de dólares mensuales durante 6 meses para que nos provean de 400MW.

Además, entre las medidas inmediatas a adoptar es fundamental dejar los pilares listos, convocando al concurso de  al menos dos licitaciones a la empresa privada para la generación de ciclo combinado a gas natural de 400MW y una segunda licitación de 600MW. Hay que abrir las puertas a las empresas privadas que quieran invertir en terminales para la importación de gas natural, reconociendo también que el Ecuador es el único país de América Latina que no explota gas natural. En este sentido, también es necesario reajustar la normativa de libre importación y comercialización de gas natural para cubrir la demanda por encima de lo que nos provean nuestras reservas. Lo urgente es dar paso a la licitación transparente de explotación de gas natural en el campo Amistad .

Es importante dar al país las respectivas líneas de transmisión eléctrica para fortalecer el sector industrial y también el sector camaronero y minero, abriendo la licitación para la construcción del sistema de transmisión Chorrillo, Chongón, Posorja y Santa Elena. Así se generarán nuevos protocolos eficientes para la distribución y los sistemas antifraude.

Ya es tiempo de adoptar una política de Estado clara que nos lleve hacia la eficiencia y productividad. Caminemos a ser más competitivos, generadores de empleo con energía barata. Es momento de iniciar la transición de generación de combustibles líquidos a gas natural que resulta menos contaminante, genera menos desgaste de la maquinaria y un 40% más barato.

¡Menos Estado, más empresa privada, más empleo y más libertad!