Replica Checa, AFP.-
El italiano Valentino Rossi (Honda) evitlas condenas y burlas prometidas por la prensa de su pa si volv nuevamente derrotado el domingo de la carrera de MotoGP del Gran Premio de Replica Checa, en el Automotodrom Masaryk de Brno (sudeste), que gancon autoridad en la recta final.
La dima de las dieciss pruebas del Campeonato del Mundo de velocidad de motociclismo 2003 vio triunfar igualmente al franc Randy de Puniet (Aprilia) en 250 cc, al cabo de un palpitante duelo con el espal Toni Els (segundo) y el sanmarinense Manuel Poggiali (tercero), ambos con Aprilia.
En 125 cc, el joven espal Daniel Pedrosa (Honda) se impuso igualmente luego de un perdo de «sequ» de victorias que lo persegu en los timos tres Grandes Premios.
Luego de cruzar la lea de llegada de la carrera de MotoGP, los «tifosi» de Valentino Rossi lo esperaron disfrazados de «presos». Una especie de sbolo de lo que hubiera ocurrido en caso de fracaso en Replica Checa. Con una cadena le ataron al tobillo una gran bola y le hicieron romper una piedra con un pico.
El curuple campe del mundo se plegde buena gana a ese juego que le proponn sus admiradores, sobre todo despu de que logreludir la nueva trampa del espal Sete Guibernau (Honda), quien era puntero en la pentima vuelta.
En una tima vuelta de antolog, Rossi se filtrpor la cuerda del catal, que terminsegundo. El australiano Troy Bayliss (Ducati) logrel tercer lugar, como en el circuito de Sachsenring (Alemania).
La angustia de Rossi y el temor de volver a perder volvn al comprobar como Gibernau recuperaba la punta en la 19 vuelta. En ese momento, y sin retenerse, volvia partir al asalto, logrando de paso el rord de vuelta en el timo giro, para ganarle la carrera a Guibernau, por un pelo, prticamente sobre la lea de llegada.
Los actores del Campeonato del Mundo de 250 cc desplegaron una espectulo casi tan alucinante como el de MotoGP.
El franc Randy de Puniet (Aprilia) hizo prueba de un gran dominio para imponerse en el final de la carrera de 250 cc en Brno (sudeste). Supo aprovechar al mimo la lucha que libraron, sin tregua, en la punta de la carrera, con el espal Toni Els y el sanmarinense Manuel Poggiali.