Benjamín Carrión sigue vivo
El Centro Cultural Benjamín Carrión comenzó a funcionar en 1994, gracias al impulso del Municipio de Quito y de los hijos del escritor lojano, quienes acordaron usar la casa donde vivió uno de los mayores promotores del arte y la cultura del país como un espacio colectivo para que las generaciones de esa época y las actuales realicen las actividades que tanto amó Carrión. Desde esa fecha, el Centro presta varios servicios a la sociedad, como: biblioteca, publicación de obras y apoyo a los artistas mediante el uso de sus instalaciones.
Esta institución depende del Municipio de Quito en lo administrativo y en la planificación. El comité consultivo orienta las actividades del Centro, estudia y aprueba planes y el presupuesto, entre otras cosas. En la actualidad, está integrado por representantes del Municipio de Quito, Fundación Caspicara, Casa de la Cultura Ecuatoriana, Dirección Metropolitana de Educación y Cultura, Dirección del Centro y un hijo de Benjamín Carrión.
Servicios
En la actualidad, el Centro ofrece a la ciudadanía una de las bibliotecas más completas en lo que se refiere a Ciencias Sociales. En este espacio, se puede hacer un recorrido por la historia y literatura latinoamericana y universal, así como consultar ensayos sociales.
Esta biblioteca que se asemeja a la descrita por Jorge Luis Borges en ‘Babel’, cuenta con 20 mil libros, de los cuales 13 mil pertenecían al maestro Carrión, mientras que los demás han ido alimentado el fondo bibliográfico que está bien catalogado. La entrada y uso del fondo es gratuito, de lunes a viernes en horario de 10h00 a 18h00.
Entre las curiosidades del Centro se mencionan libros sobre Benjamín Carrión y su gestión cultural, escritos por intelectuales extranjeros quienes han valorado la actividad y el pensamiento de este suscitador, que supo consolidar relaciones de amistad y reflexión con los personajes más descollantes de la época, dentro de América Latina y Europa. Cabe mencionar que estos libros son de poco conocimiento público y de difícil adquisición. José Orero de Julián y Liliana de Castillo Rojas, Lermontov Venegas y Michael Handelsman dedicaron investigaciones a Carrión.
Palabras sin olvido
Cuando se entra a la habitación, donde se conservan algunas piezas del escritor, se encuentran frases que han sido inmortalizadas por la fuerza de los contenidos como ésta: “Yo bendigo, de entre toda las cosas que la vida me ha dado, esta de no haber llegado a la vejez agrio de estómago, de corazón y mente. Y seguir con mi incorregible gana de poder comprender las cosas y poder admirarlas”… Frases que están a un costado del bastón y la boina que le acompañaron en sus últimos años de vida.
Una de las actividades que impulsó el creador de la Casa de la Cultura fue la publicación de las obras literarias más sobresalientes de su época. De igual manera, el Centro lleva a cabo una política editorial que tiene como objetivo rescatar el pensamiento de Carrión, donde se incluye la correspondencia que intercambió con personajes de México, Centroamérica y Ecuador.
También se han publicado estudios de su obra. La institución custodia cuatro mil cartas recibidas por Benjamín Carrión, de las cuales 3200 están catalogadas. Gustavo Salazar y Alejandro Querejeta, junto con los investigadores de la institución, han participado en las últimas publicaciones.
El Centro en su planificación contempla el apoyo editorial para la publicación de obras que han sido calificadas por la dirección, posterior a la presentación de proyectos bien sustentados y con presupuestos manejables. En ese sentido, es una puerta para autores que carecen de recursos y son noveles.
Promoción cultural
Las instalaciones de este espacio cultural son utilizadas para la exposición de artes plásticas, presentación de libros, conferencias y cursos, actividades que no tienen ningún costo para los solicitantes, pues se trata de impulsar a quienes carecen de recursos en la mayoría de los casos.
Datos
Creación: 1994
Número de ejemplares: 20 mil
Atención: 10h00 a 18h00, de lunes a viernes
Entrada: gratuita