Padres e hijos comparten la misma profesión

Milton Silva junto a su hija María Elena mientras atienden a un paciente.
Milton Silva junto a su hija María Elena mientras atienden a un paciente.

Las profesiones se eligen según la predilección. Pero también surge un cariño especial por las carreras que han elegido los padres y que los hijos se sienten en ellas reflejados, porque pueden compartir más momentos juntos y temas de igual o similar interés.

Milton Silva, es padre de María Elena y Juan Francisco, son mellizos, y junto a su él tienen un consultorio en el sector de la Villaflora, al sur de Quito, los tres son odontólogos. “Me satisface enormemente que mis hijos hayan escogido mi carrera” expresó Milton. “Talvez el hecho de haber trabajado cerca de casa fue la influencia que tuvieron, porque observaron de cerca el trabajo que realizaba y de eso nace lo que hoy son”, indicó el halagado padre.

Al dialogar con María Elena, se siente la emoción que tiene al expresar que su progenitor es su ejemplo de responsabilidad, “siempre nos ha enseñado a hacer un buen trabajo” comentó.

Jorge Rivadeneira Bracho, estudiante de Derecho de la Universidad Iberoamericana, cuenta que desde pequeño sintió apego por lo que su padre, Luís Rivadeneira, realizaba, “mi papá se preparaba para dar sus clases, y yo, me interesé por los libros que el leía”, dijo. “Toda mi familia es llena de abogados, mi padre además es Catedrático, enseña Derecho, y me parece que es una profesión que te permite defender a las personas. Incluso mi padre es mi ejemplo de superación, porque desde los 17 años empezó a trabajar y a educarse para conseguir lo que hoy es”, expuso.

Los hijos al seguir los pasos de sus padres sienten agradecimiento porque fueron ellos quienes incentivaron y desarrollaron las profesiones de las que ahora también forman parte. Es el caso de Alejandro Escudero Jiménez, estudiante de Comunicación Social de la Universidad Central del Ecuador quien comentó, “desde que tenía 5 años de edad, mi padre Carlos Escudero Maldonado que es Camarógrafo, me llevaba al estadio y mientras el hacía la cobertura del partido yo disfrutaba del espectáculo”, dijo. Además indica que fue por su padre que descubrió su pasión por el deporte y que su aspiración es ser periodista deportivo.

Todos los entrevistados concuerdan en que sus padres son un ejemplo de vida, y que el día del padre no solo es el tercer domingo de junio, sino desde el momento mismo en el que sus hijos empezaron a crecer en un embrión, y compartir con ellos sus gustos y aficiones hace que la vida no sea un simple existir.

Luís Rivadeneira junto a su hijo.
Luís Rivadeneira junto a su hijo.