La cruel realidad

MARÍA LUISA GÓMEZ DE LA TORRE GÓMEZ

La fortaleza que la gran mayoría del pueblo ecuatoriano, ha demostrado para someterse a la necesidad económica producto de la mala administración del gobierno de los que huyeron y siguen huyendo puede acabarse en cualquier momento si las autoridades gubernamentales con mayor entereza no toman los toros por los cuernos. Hambre, pobreza, enfermedad, falta de empleo, jubilados sin sueldo, bonos para contentamiento ficticios, mala educación, necesidades en los centros educativos, delincuencia proliferante, droga que pulula por doquier, asesinatos a vista y paciencia, femicidios, asaltos, violaciones, atropello a la niñez, canasta familiar sobre el mínimo vital, carencia de medicamentos en hospitales, deudas a proveedores, desempleos, y una sarta de falacias abundan y el pueblo aguanta.

Justo en este mes de diciembre el Fondo Monetario Internacional aprueba la prestación que se esperaba para finalizar el año económico agobiante con tantas deudas pendientes y entre ellas al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) que de no cubrirse prontamente los jubilados y pensionista no percibirían los emolumentos de justicia. El atolladero económico debe permitir al gobierno la máxima reflexión de lo más urgente para evitar el estallido social que en cualquier momento puede volverse a presentar.

Con facilidad se critica al FMI, pero existe la solución de inmediato para cubrir la brecha fiscal y que el pueblo no se muera de hambre y sed; el FMI cobra un porcentaje de interese menor de lo que cobra la China, exige sus puntuaciones como todo prestamista y si se necesita hay que aceptar y cumplir para solucionar cuanto antes la abrumadora necesidad que sufrimos los ecuatorianos producto de quién?

Todos debemos tener en nuestro corazón la palabra de Dios para concebir el éxito en nuestras vidas pues las fiestas decembrinas son inminentemente comerciales, la familia se puede reunir en cualquier momento, las vacaciones las disfrutan los que pueden y tienen dinero y se lucen las ostentaciones sin miramientos de amor para los que no tienen y necesitan. La fortaleza espiritual, el afán de sabiduría y educación, excelentes manifestaciones de respeto, agradecimiento y sobre todo dar al que nos necesita debe primar en la conciencia de los mortales.

MARÍA LUISA GÓMEZ DE LA TORRE GÓMEZ

La fortaleza que la gran mayoría del pueblo ecuatoriano, ha demostrado para someterse a la necesidad económica producto de la mala administración del gobierno de los que huyeron y siguen huyendo puede acabarse en cualquier momento si las autoridades gubernamentales con mayor entereza no toman los toros por los cuernos. Hambre, pobreza, enfermedad, falta de empleo, jubilados sin sueldo, bonos para contentamiento ficticios, mala educación, necesidades en los centros educativos, delincuencia proliferante, droga que pulula por doquier, asesinatos a vista y paciencia, femicidios, asaltos, violaciones, atropello a la niñez, canasta familiar sobre el mínimo vital, carencia de medicamentos en hospitales, deudas a proveedores, desempleos, y una sarta de falacias abundan y el pueblo aguanta.

Justo en este mes de diciembre el Fondo Monetario Internacional aprueba la prestación que se esperaba para finalizar el año económico agobiante con tantas deudas pendientes y entre ellas al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) que de no cubrirse prontamente los jubilados y pensionista no percibirían los emolumentos de justicia. El atolladero económico debe permitir al gobierno la máxima reflexión de lo más urgente para evitar el estallido social que en cualquier momento puede volverse a presentar.

Con facilidad se critica al FMI, pero existe la solución de inmediato para cubrir la brecha fiscal y que el pueblo no se muera de hambre y sed; el FMI cobra un porcentaje de interese menor de lo que cobra la China, exige sus puntuaciones como todo prestamista y si se necesita hay que aceptar y cumplir para solucionar cuanto antes la abrumadora necesidad que sufrimos los ecuatorianos producto de quién?

Todos debemos tener en nuestro corazón la palabra de Dios para concebir el éxito en nuestras vidas pues las fiestas decembrinas son inminentemente comerciales, la familia se puede reunir en cualquier momento, las vacaciones las disfrutan los que pueden y tienen dinero y se lucen las ostentaciones sin miramientos de amor para los que no tienen y necesitan. La fortaleza espiritual, el afán de sabiduría y educación, excelentes manifestaciones de respeto, agradecimiento y sobre todo dar al que nos necesita debe primar en la conciencia de los mortales.

MARÍA LUISA GÓMEZ DE LA TORRE GÓMEZ

La fortaleza que la gran mayoría del pueblo ecuatoriano, ha demostrado para someterse a la necesidad económica producto de la mala administración del gobierno de los que huyeron y siguen huyendo puede acabarse en cualquier momento si las autoridades gubernamentales con mayor entereza no toman los toros por los cuernos. Hambre, pobreza, enfermedad, falta de empleo, jubilados sin sueldo, bonos para contentamiento ficticios, mala educación, necesidades en los centros educativos, delincuencia proliferante, droga que pulula por doquier, asesinatos a vista y paciencia, femicidios, asaltos, violaciones, atropello a la niñez, canasta familiar sobre el mínimo vital, carencia de medicamentos en hospitales, deudas a proveedores, desempleos, y una sarta de falacias abundan y el pueblo aguanta.

Justo en este mes de diciembre el Fondo Monetario Internacional aprueba la prestación que se esperaba para finalizar el año económico agobiante con tantas deudas pendientes y entre ellas al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) que de no cubrirse prontamente los jubilados y pensionista no percibirían los emolumentos de justicia. El atolladero económico debe permitir al gobierno la máxima reflexión de lo más urgente para evitar el estallido social que en cualquier momento puede volverse a presentar.

Con facilidad se critica al FMI, pero existe la solución de inmediato para cubrir la brecha fiscal y que el pueblo no se muera de hambre y sed; el FMI cobra un porcentaje de interese menor de lo que cobra la China, exige sus puntuaciones como todo prestamista y si se necesita hay que aceptar y cumplir para solucionar cuanto antes la abrumadora necesidad que sufrimos los ecuatorianos producto de quién?

Todos debemos tener en nuestro corazón la palabra de Dios para concebir el éxito en nuestras vidas pues las fiestas decembrinas son inminentemente comerciales, la familia se puede reunir en cualquier momento, las vacaciones las disfrutan los que pueden y tienen dinero y se lucen las ostentaciones sin miramientos de amor para los que no tienen y necesitan. La fortaleza espiritual, el afán de sabiduría y educación, excelentes manifestaciones de respeto, agradecimiento y sobre todo dar al que nos necesita debe primar en la conciencia de los mortales.

MARÍA LUISA GÓMEZ DE LA TORRE GÓMEZ

La fortaleza que la gran mayoría del pueblo ecuatoriano, ha demostrado para someterse a la necesidad económica producto de la mala administración del gobierno de los que huyeron y siguen huyendo puede acabarse en cualquier momento si las autoridades gubernamentales con mayor entereza no toman los toros por los cuernos. Hambre, pobreza, enfermedad, falta de empleo, jubilados sin sueldo, bonos para contentamiento ficticios, mala educación, necesidades en los centros educativos, delincuencia proliferante, droga que pulula por doquier, asesinatos a vista y paciencia, femicidios, asaltos, violaciones, atropello a la niñez, canasta familiar sobre el mínimo vital, carencia de medicamentos en hospitales, deudas a proveedores, desempleos, y una sarta de falacias abundan y el pueblo aguanta.

Justo en este mes de diciembre el Fondo Monetario Internacional aprueba la prestación que se esperaba para finalizar el año económico agobiante con tantas deudas pendientes y entre ellas al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) que de no cubrirse prontamente los jubilados y pensionista no percibirían los emolumentos de justicia. El atolladero económico debe permitir al gobierno la máxima reflexión de lo más urgente para evitar el estallido social que en cualquier momento puede volverse a presentar.

Con facilidad se critica al FMI, pero existe la solución de inmediato para cubrir la brecha fiscal y que el pueblo no se muera de hambre y sed; el FMI cobra un porcentaje de interese menor de lo que cobra la China, exige sus puntuaciones como todo prestamista y si se necesita hay que aceptar y cumplir para solucionar cuanto antes la abrumadora necesidad que sufrimos los ecuatorianos producto de quién?

Todos debemos tener en nuestro corazón la palabra de Dios para concebir el éxito en nuestras vidas pues las fiestas decembrinas son inminentemente comerciales, la familia se puede reunir en cualquier momento, las vacaciones las disfrutan los que pueden y tienen dinero y se lucen las ostentaciones sin miramientos de amor para los que no tienen y necesitan. La fortaleza espiritual, el afán de sabiduría y educación, excelentes manifestaciones de respeto, agradecimiento y sobre todo dar al que nos necesita debe primar en la conciencia de los mortales.