¡No se preocupe!

Ana del Rocío Silva

La semana pasada nos referíamos a la contratación de servicios de telefonía, internet o TV por cable del CNT, Corporación Nacional de Telecomunicaciones, parecería que dicha institución es la isla del tesoro, en la que no se aplican sistemas de control de calidad, mucho menos, se hacen encuestas de satisfacción para mejorar el servicio, en una sola ocasión que nos acerquemos a cualquier espacio de atención, constataremos la cantidad de reclamos que emiten los usuarios, obviamente, nunca hay una respuesta que satisfaga al usuario.

Hay muchos números celulares asignados con mensualidad básica, sin ser solicitados, sin embargo, su facturación llega cada mes con el débito automático, hay muchos servicios que ya no están vigentes y siguen cobrándose, verbigracia, el servicio EVO o el de control de llamadas a celulares desde un número fijo, el usuario puede lograr la supresión de los cobros en dos años de trámites continuos; ante cada insistencia, la respuesta del funcionario será: “no se preocupe”.

Entonces, ¿de qué deberíamos preocuparnos?, tal vez deberíamos buscar la institución encargada de hacer cumplir la Ley Orgánica de Defensa del Consumidor?, y ahí empezar a preocuparnos, porque posiblemente para exteriorizar la inconformidad, tendríamos que trasladarnos a un lugar específico en plena pandemia, cuyos funcionarios están en teletrabajo y sin acceso telefónico.

Estas estampas folklóricas, de la atención y servicios de CNT, permiten dar la razón a Lenin Moreno, cuando dice, que él habría querido “un mejor pueblo”, así es, si fuéramos un mejor pueblo que exige sus derechos con voz mesurada y frente en alto, habríamos exigido desde hace rato, un mecanismo de compensación y retribución en la dotación de servicios que no satisfacen la calidad con la que fueron ofertados, que nos cobran por un servicio inexistente, o  para cuando sobrepase el tiempo de cierre de trámite de un proceso de reclamo a más de una semana; sí debería haber una sanción pecuniaria a la entidad en este caso (CNT), pero sucede lo contrario, con la ineptitud, ausencia de control de calidad de atención, siempre el afectado será el usuario.  [email protected]