La presencia de libadores en la parroquia de Pinllo preocupa a sus habitantes, debido a que ocupan los espacios públicos como parques, canchas, veredas y calles.
Según vecinos y dueños de locales comerciales del centro de la parroquia, esto se incrementó luego del confinamiento, pues más personas de las zonas altas llegarían a libar en el sitio.
La venta camuflada de alcohol es otro de los problemas que denuncian los moradores, como Carmen B. quien dice que en algunas tiendas venden botellas de puro y esto atrae más a los borrachos que circulan o se duermen en los sitios de mayor concurrencia.
A decir de la Policía, ellos los retiran porque no pueden libar en la vía pública, sin embargo, esto no es suficiente porque muchos vuelven a los espacios y hasta duermen en esos lugares.
Carlos V. es dueño de un lugar de comidas en Pinllo, él dice que el problema social y de salud que se da ahora en la parroquia es común pero ya deja consecuencias, pues las personas que visitan el lugar ven con desagrado estas imágenes de gente alcoholizada.
Por su parte, las autoridades parroquiales no desconocen la realidad que hay desde hace unos meses en la zona y aseguran trabajar junto con Tenencia Política y la Policía para movilizar a las personas en estado etílico, sin embargo el problema persiste. (CNS)