Cómo sobreponerse a un asalto

Los expertos dan ciertas pautas para poder retornar a la normalidad.
Cuidado. Los expertos dan ciertas pautas para poder retornar a la normalidad.

A Nathaly le robaron a mediados de mayo, pasaban del mediodía de ese viernes 13 y hasta el momento se sobresalta cuando alguien corre a su lado.

“Es difícil caminar tranquila por la calle, de verdad ahora siento que todo el mundo me persigue y si tuviese los recursos de verdad solo me movilizaría en taxi”, dijo la mujer de 40 años.

Algo similar le pasa a Estefanía de 26 años, a quien le robaron en el sector del mercado Modelo el 16 de mayo y ahora le cuesta salir a la calle sola.

“Dos sujetos me sostuvieron de brazo y me amenazaron con cuchillos para que les diera mi maleta (donde estaba mi Tablet y documentos) y mi celular, ahora en serio siento pavor de salir a la calle”, dijo la mujer.

 

 

Retomar la rutina es fundamental

Ante esto los expertos señalan que no existe una solución única o mágica para superar el trauma de un robo, al fin y al cabo, te sientes vulnerable y superar esto requiere de tiempo y mucha paciencia.

Estos consejos que vamos a exponer a continuación pueden ayudarte a llevar las secuelas de esta terrible experiencia un poco mejor, o incluso a vencerlas.

  1. Refuerza la seguridad de tu hogar. Asegúrate de cerrar bien puertas y ventanas. Comienza a considerar el instalar un Sistema de Seguridad en tu hogar. Los ladrones se lo suelen pensar dos veces a la hora de intentar entrar en una casa que dispone, por ejemplo, de cámaras de vigilancia.
  2. No tengas miedo a tu casa. Es natural que no te sientas seguro y evites quedarte solo. Invita a familiares y amigos para que, poco a poco, vuelvas a sentirte cómodo en tu propio hogar.
  3. Redecora o cambia los muebles de sitio. Pintar las paredes, cambiar los muebles de sitio o incluso adquirir algún elemento nuevo de decoración pueden ayudarte a, de alguna manera, ver tu casa como un lugar distinto.
  4. Expresa tus sentimientos. Estás pasando por el trauma de un robo, no te guardes la rabia, la tristeza o cualquier otra emoción que te invada. Acepta la ayuda de otros y date tiempo, cada persona es un mundo, pero siempre se lleva todo mejor con apoyo de familiares y amigos.
  5. No dejes que venza el miedo. Tras una experiencia semejante es normal sentir miedo, pero no dejes que éste te atenace. Hay que ir dando pasitos pequeños para empezar a sentirte más seguro y cómodo con la situación.
  6. Vuelve a tu rutina en cuanto te sea posible. Intenta volver a hacer las cosas que hacías diariamente en cuanto tengas la oportunidad para ir poco a poco retomando la sensación de normalidad.
  7. Canaliza tus emociones a través de la creatividad. Pintar o escribir un diario es una buena manera de expresar emociones y pensamientos que puede ser de gran ayuda para superar el trauma de un robo.
  8. Intenta tener un comportamiento saludable. A menudo, la ansiedad puede ser tan grande que nos lleve a comer y beber en exceso o fumar más de lo habitual. Come bien, haz ejercicio y no dejes que lo que ha ocurrido afecte también a tu salud.
  9. Evita tomar decisiones importantes. Ya estás viviendo una situación suficientemente estresante, no es el momento de tomar decisiones trascendentales que añadan más angustia a tu vida.

 

TOME NOTA
Tras el robo o el asalto violento, la víctima no querrá, 
con toda probabilidad, quedarse solo en casa ni dormir 
en ella, al menos, por unos días.

 

 

¿Cuándo pedir ayuda profesional?

No existen asaltos ‘ligeros’ y ‘graves’, en realidad los dividimos de esta manera porque hemos comenzado a normalizar la violencia.

Esto es algo importante al momento de superar un asalto, ya que cada persona lo percibe de diferente manera y, la idea de un ‘asalto leve’, puede frenar la intención de pedir ayuda.

Algunos de los síntomas más comunes después de un asalto y que corresponden a un posible trauma son:

  • Taquicardia
  • Insomnio
  • Pérdida de confianza en la sociedad y personas cercanas
  • Miedo
  • Pausa o cambios en las actividades cotidianas

Si pasan los días y simplemente no puedes recuperar tu cotidianidad, es momento de pedir ayuda.

En realidad, una de las consecuencias más severas es la pérdida de confianza, ya que es una tarea compleja recuperarla.

Violencia es violencia, así que no tengas pena de denunciar o hablar sobre el tema. Expresarlo siempre es mejor.

 

 

Para tomar en cuenta

  • Siempre es bueno hablar de lo que pasó, pero, principalmente, aceptarlo y dejar ir las cosas materiales.
  • Otro punto importante es, sin duda, no culparte de la situación. Tu forma de vestir, tu apariencia o tu nivel socioeconómico no son motivos para que sufras un asalto.
  • No te recrimines el no haber hecho nada para impedirlo. Cada persona reacciona diferente y el hecho de que no hayas puesto resistencia, no quiere decir que seas menos inteligente o capaz.
  • Evita victimizarte sin normalizar la violencia. Una cosa es aceptar el robo y otra, sentir pena por ti, así que, una vez que lo hayas entendido, poco a poco podrás dejarlo ir.

No es malo sentir miedo; sin embargo, no debes parar tu vida. Lo mejor es sustituir las pertenencias robadas y plantearnos un día a día con optimismo y sin “presentir que nos volverá a suceder”.