Búnkeres para el apocalipsis es parte de la tendencia de los millonarios del mundo.

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FORMA. Esta es una de las infraestructuras de los búnkeres que se construyen para supervivencia.

Hablar del búnker ‘del fin del mundo’ parece una utopía, de hecho, habrá quienes imaginen se trate de un cuarto cerrado, sin ventilación, con comida enlatada por montones y apenas algo de comodidad, mas la realidad es muy distinta.

Según un reporte realizado por la CNN de Latinoamérica, una serie de empresas de todo el mundo, se están encontrando con una demanda en auge de estructuras que protejan cualquier tipo de riesgo, desde una pandemia, la caída de un asteroide o la III Guerra Mundial y que, a su vez, cuente con todos los lujos.

“El búnker de tu padre o tu abuelo no era muy cómodo”, dice Robert Vicino, un empresario de bienes raíces y CEO de Vivos, la compañía que fundó y que desarrolla refugios especiales de altísima gama, a nivel mundial.

Los refugios antiguos “estaban hechos de metal como un búnker de guerra o algo así, la verdad es que la humanidad no podría subsistir a largo plazo en algo tan sombrío”, agregó el administrador.

La demanda para el apocalipsis

Los más interesados en estas construcciones casi de película, son aquellos que conforman las élites del planeta. Bill Gates, por ejemplo, suena como uno de los pioneros en mantener en búnker, la mayoría de sus propiedades, esto, para albergar a sus familias en caso de peligro inminente.

Son como el Arca de Noé

Uno de los refugios de la empresa VivosxPoint, está cerca de Black Hills en Dakota del Sur y consta de 575 búnkeres militares que, en su momento, sirvieron como depósito de municiones hasta 1967.

Una de estas instalaciones da cabida a 5.000 personas y las unidades habitacionales, tienen un costo de entre 25 y 2000 mil dólares, cada uno.

El precio depende de acabados minimalistas o de alta calidad, según la empresa fabricante. Por lo demás el complejo está equipado con todas las comodidades, como una pequeña ciudad, que incluye teatros, escuelas, piscinas, clínicas, spa, gimnasios y más. (MAG)