Un empresario comprometido con su profesión

Administrador. Robinson Vela Duque tienen 16 años de libre ejercicio profesional. Es ingeniero eléctrico.
Administrador. Robinson Vela Duque tienen 16 años de libre ejercicio profesional. Es ingeniero eléctrico.

Con sus ideales bien trazados, Robinson Eduardo Vela Duque se ha ganado el respeto de muchas personas y el odio de otras, por ello no está dispuesto a cambiar su ideología, que sigue en la misma línea desde que fue estudiante universitario, así lo asegura este próspero empresario que le debe mucho a Santo Domingo, tierra que lo vio nacer y le ha brindado la oportunidad de realizarse profesionalmente.

Al cumplir 50 años de cantonización Santo Domingo, dijo que le da mucha tristeza, al ver que las autoridades no han logrado su desarrollo total. Indicó que no es político, pero no descarta la idea, pero ejerciéndola de una manera diferente y con proyectos claros y precisos.

Con sus empresas fortalece la economía del cantón y la provincia, generando trabajo a cientos de hombres y mujeres. Es el gerente general de Disevsa Constructores, brindando servicio de ingeniería, importaciones y distribución, con oficinas en Santo Domingo, Ibarra y Quito.

Asegura Vela que el secreto de haberse consolidado como empresario está en tratar de hacer las cosas bien, no decir lo que se va hacer y hacer lo que se dice, “así como respetar los acuerdos, a veces perdiendo, se gana”.

Trayectoria

Manifestó que su primera empresa nace con la necesidad y el hambre. “Conocí a mi esposa, Marcela Pico, mientras estudiaba ingeniería en Portoviejo, ella salió embrazada, mi padre me dio la espalda y me tocó asumir una gran responsabilidad muy joven y buscar la forma de ganarme la vida honradamente”, expresó.

Recuerda que terminó la universidad y regresó a Santo Domingo, pasando peripecias, teniendo un título universitario le tocó agarrar un par de alicates y buscar trabajo como electricista. Indicó que durante 10 años cayeron en la tentación de los usureros, prestando dinero y pagando intereses bastante altos.

Su esposa se puso una lavandería de ropa, con lo que aportaba económicamente al hogar, “no teníamos casa propia, había muchas deudas y limitaciones”.

Transformación

Afirma que su vida cambió cuando un amigo lo invitó a vivir una experiencia religiosa, haciendo un retiro espiritual junto a su esposa, transformando el núcleo familiar. “Hasta esa fecha nunca cogía contratos mayores a 7 mil dólares, pero desde ahí me dieron mi primer contrato grande, de 128 mil dólares, para trabajar en electrificación rural y después siguieron viniendo un contrato tras otro, con recursos fuertes, así fui conociendo gente influyente en el medio que me dieron la apertura para trabajar”.

Emocionado mencionó que en menos de cinco años de haber hecho el retiro cambiaron las cosas, tenían un grupo como de 60 personas dependientes laborales y crecieron muy rápido, en la actualidad tratan de sacar adelante cinco empresas, cada una tiene su función. “La proyección que tenemos da un panorama bastante alentador, soy enemigo de las coimas, de hecho, no soy contratista del estado”.

Actualmente trabajan con la modalidad de subcontrato con empresas nacionales e internacionales, uno de los trabajos que ejecuta es en Yachay.

“Es un proyecto desafío para nosotros, porque estamos implementado una tecnología en sistema de distribución, potencia y obra civil. Estamos creando una arquitectura de ingeniería en la parte eléctrica donde la ciudad va hacer autónoma, en el país no existe esa tecnología que ellos quieren implementar y que nosotros estamos siendo parte de ese desarrollo”, puntualizó.

En lo personal

Robinson Vela Duque, es nacido en Santo Domingo, futo de la emigración, sus padres Héctor Aníbal Vela y Laura Duque llegaron muy jóvenes como la mayoría de Santodomingueños, eran de un estrato social de extrema pobreza. “Desde que tengo uso de razón recuerdo haber visto trabajar duro a mi padre”.

El matrimonio procreó cuatro hijos varones y una mujer, “creo que los varones tenemos la misma ideología hemos servido de apoyo para el trabajo de mi padre en su juventud. Mi padre ha sido de carácter fuerte, de esos viejos del barro duro que son incansables y con una fuerza de voluntad bastante admirable”. (LMM)

EL DATO
Su empresa Disevsa está ubicada en la avenida Tsáchila y Río Yanuncay. Fono: 0227 67 362.

Su vida

Tiene 19 años junto a su esposa, “vivimos 11 años en unión libre y 8 casados”. Sus hijos Héctor Andrés, Robinson Ariel, Dayana Vanessa y su nieto Matías Arón, junto a Doménica Guevara, conforman su familia.

Unidad. Tiene una hermosa familia, tres hijos, un nieto y su nuera, a quien le trata de demostrar lo mismo que su padre hizo.
Unidad. Tiene una hermosa familia, tres hijos, un nieto y su nuera, a quien le trata de demostrar lo mismo que su padre hizo.