Es notable el esfuerzo del Consejo de Participación Ciudadana Transitorio por señalar y destituir a figuras prominentes de la “metida de mano a la Justicia”. Los reclamos de los sacudidos y bajados de sus posiciones de “ordeno y mando” han transitado con mucho ruido mediático en sus denuncias ante la Fiscalía y en la Asamblea Nacional. Sin embargo, la sacudida es insuficiente.
Se percibe resistencia desde dentro del propio Estado, un afán de funcionarios intermedios que ven peligrar el puesto, por dificultar, retardar, ignorar o cuestionar formas y estilo en cómo se presentan los nuevos lineamientos gubernamentales. Son aquellos que, en la década pasada, recibieron órdenes desde arriba y las obedecieron a ciegas, pero al mismo tiempo las hicieron cumplir sin chistar a quienes estaban bajo su mando.
El Estado necesita de otra sacudida, no se trata de aligerarlo para equilibrar las cuentas fiscales, lo cual es plausible, sino para que quienes han cumplido con su deber de manera ética sean quienes prevalezcan. En cada ministerio e institución estatal la mayoría sabe quiénes son los que hacen que todo funcione como si en los engranajes echaran arena para entorpecerlo todo.
No es un problema de derechas o izquierdas, sino esencialmente moral. El Consejo de Participación Ciudadana Transitorio no solo debe limpiar la casa desde el recibidor, hay que hacerlo hasta lo profundo de la cocina, donde todo se recompone y se adereza a conveniencia. De lo contrario, más temprano que tarde todo estará como cuando lo recibió el presidente Moreno en mayo de 2017: en las mismas condiciones y con la misma gente o parecida.
Nunca odies a tus enemigos, afecta tu juicio”. Mario Puzo Escritor estadounidense (1920-1999)
Tu corazón es grande y tu lengua hábil. Entre las dos cosas llegarás muy lejos”. Rudyard Kipling Novelista inglés (1865-1936)