En las puertas de la Catedral de Ambato, ubicadas frente al Parque Montalvo, se instalaron vallas metálicas que superan el metro con 50 centímetros de altura con el objetivo de evitar que personas sin hogar utilicen este espacio para libar.
Esta situación causó criterios divididos entre la ciudadanía, ya que muchos indican que es una buena alternativa para proteger y mantener limpio el templo religioso.
Marcelo Castro, ciudadano ambateño, mencionó que la instalación de esta estructura es positiva porque así se evita que la delincuencia utilice el lugar para refugiarse.
“Siempre había gente durmiendo aquí en cartones y eso también daba mal aspecto”, dijo.
Luisa Carvajal, también ambateña, aseguró que la iglesia debería otorgar un espacio adecuado para las personas que solían dormir en las puertas de la Catedral, según su criterio, esta decisión no demuestra la solidaridad y otros valores de la religión.
Objetivo
Mario Zarabia, párroco de la Catedral de Ambato, mencionó que en primera instancia la estructura metálica se ubicó con el objetivo de evitar daños en la alegoría de flores y frutas que se colocó durante la fiesta mayor de los ambateños.
“Cumplida la primera función consideramos pertinente mantenerla para poder así reestablecer el orden y precautelar la integridad tanto del templo como de la ciudadanía”, dijo.
Zarabia indicó que este espacio se convirtió en una guarida de personas que cayeron en el vicio del alcohol y otras sustancias, quienes “no se dejan ayudar”, indicó.
El Párroco aseguró que para personas sin hogar la Diócesis cuenta con dos albergues en la ciudad que tiene la capacidad para aproximadamente 130 personas.
Quienes asisten pagan un dólar diario y obtienen tres comidas diarias y la oportunidad de mejorar su vida y recuperarse de sus vicios.
“No es que la iglesia está expulsando ni cerrando las puertas a nadie, al contrario, buscamos precautelar el orden y la imagen de la ciudad”, dijo Zarabia. (RMC)