Al amanecer desde Tisaleo se reportó la muerte de Flavio Yugcha, el hombre murió ahogado en un pozo de agua.
Cuando eran las cinco de la mañana, los vecinos del barrio Campoalegre, escucharon sonidos extraños que venían desde un tanque reservorio.
Uno de ellos, salió para ver que estaba sucediendo, fue cuando se dio cuenta que, dentro del pozo, había un hombre que pedía auxilio.
El vecino fue a pedir ayuda a otras personas para poder rescatar a Flavio, no pasó tanto tiempo, y los sonidos desaparecieron, al igual que el cuerpo que se hundió, minutos después apareció flotando. El hombre no aguantó más y murió.
Jaqueline Tubón, es una de las moradoras que vive cerca de donde ocurrió el percance, la mujer asegura que oyó que el agua golpeaba pero que nunca se imaginó que era una persona que pedía ayuda.
“Cuando salimos, había otros vecinos y ahí nos enteramos de lo sucedido, el chico ya estaba muerto”, dijo Jaqueline.
Flavio no era de ese barrio, él vivía en La Merced. El viernes fue su cumpleaños. Estuvo trabajando todo el día. Flavio era obrero de confección de jeans, pero laboraba en su casa.
Después de su trabajo, alrededor de las 21:00 se fue a jugar vóley. Durante el partido empezaron a tomar, por lo que se presume que, por su estado de embriaguez, habría caído al pozo.
Al lugar de los hechos llegó la ambulancia del Cuerpo de Bomberos de Tisaleo, quienes comprobaron que el hombre ya no tenía signos vitales.
Flavio no tenía zapatos por lo que creía que quizá estuvo en una pelea, pero la Policía Nacional comprobó que no tenía signos de violencia.
Los agentes de la Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestro (Dinased) y la Unidad de Criminalística acudieron para hacer el levantamiento del cadáver, pero los moradores del sector no lo permitieron.
El cuerpo se quedó en el sitio bajo la responsabilidad del cabildo y de otras autoridades de la comunidad. (APQ)