El olor de la humedad se confunde con el aroma de las orqueas. Los paros cantan al ritmo de las cascadas y las mariposas vigilan a los aventureros que hacen canotaje en los rs.
Ese es el Mindo que conoce Diana Bermez, una operadora de turismo, que vive desde muy ni en la zona.
Mientras camina hacia la cascada de Nambillo, donde vivipor tres meses, la operadora turtica de 16 as, cuenta que no hay nada mejor que visitar este bosque protector, ubicado a 80 kiletros al norocciente de Quito.
No le importa que sus zapatos se llenen de lodo a cada paso. Eso es lo que le gusta. En la bajada a la cascada mira co un grupo de paros juega entre los boles y lamenta no tener sus binoculares cerca.
«Para llegar a la cascada de Nambillo hay que caminar unas tres horas», dice Diana, quien comenta que tambi hasta esa zona tambi se puede llegar en bicicleta o en caballo.
Un rico chapuz
Despu de mucho esfuerzo y suspiros Diana llega a la cascada y siente un gran alivio al meter sus pies en un agua que casi nunca esta fr.
Junto a ella, Dekson Velquez, un gu de canotaje, quiere mostrar la raz por lo que la cascada de Nambillo es muy popular entre los visitantes.
Se quita la ropa y por un camino muy estrecho se dirige hasta la parte superior de la cascada.
Listos! grita y, desde una altura de 12 metros, se lanza y se pierde dentro de las burbujas de agua por unos segundos.
Al salir se acomoda el cabello y con una gran sonrisa pregunta si le tomaron una fotograf. Para tener un recuerdo inolvidable.
Para Diana y Dekson esa aventura se repite cada vez que tienen que guiar a cientos de turistas que visitan la zona. Ellos no pierden la emoci.
Luego de los chapuzones la aventura puede continuar por las cascadas de Las Ondinas, de Los Colibrs, de La Madre y la Cascada Reina.
«Esta ruta es conocida como el Santuario de las Cascadas y esta llena de lugares para acampar y para compartir momentos familiares», explica Diana, quien sostiene que la caminata es una de las mejores formas de hacer turismo ecolico.
Emoci y Vtigo
Otra forma para llegar al santuario de las cascadas es a trav de una tarabita de monta, que hace un recorrido de 530 metros.
«Esta tarabita esta 150 metros sobre la tierra», explica Rom Arteaga, el administrador del lugar.
Seg Arteaga la tarabita es usada mucho durante los fines de semana atendiendo a un promedio de 400 a 500 personas por d.
«La tarabita es rida y segura», dice Arteaga, quien con este singular medio de transporte acorta un viaje de dos horas a 15 minutos.
Cuando los turistas suben a la tarabita se emocionan, gritan, sonrn y saludan. Todo hasta que llegan a la mitad del viaje donde el vtigo los obliga a cerrar sus ojos hasta llegar a tierra firme.
Laboratorios de vida
En Mindo existe un promedio de 250 especies de mariposas. Estudiarlas es la mayor satisfacci que tienen Rosie Gez de la Torre y su hijo Marcelo.
Estos cienticos han dedicado su vida a las mariposas y, hasta el momento, conocen la vida de 27 especies en forma pormenorizada.
Cada amanecer ellos esperan el nacimiento de las nuevas mariposas. «Todos los ds tenemos nacimientos», dice Marcelo quien cuida el proceso de crecimiento de los maravillosos insectos desde que son orugas hasta que abren sus alas de mariposas.
Con siete as de experiencia, Marcelo y su madre saben que mantener un invernadero para mariposas no es fil. Su recompensa esten mostrar co se puede estudiar y conservar la belleza natural.
Desafiando a la corriente
Un d no es suficiente para conocer todos los rincones de Mindo. Esto es lo que dice Dekson Velquez, gu de canotaje, mientras amarra cuatro boyas para construir una balsa.
A sus 26 as Dekson es muy consciente de los peligros que pueden presentarse en un r durante una prtica de tubing.
Antes de empezar un recorrido con turistas se toma unos minutos para hablar de este tema. Luego, reparte cascos y salvavidas a sus clientes y cuando todos est listos se lanza al agua para enfrentar a la corriente.
El sentimiento de esta aventura llena de agua y adrenalina, no lo puede contar. dice que eso es algo que se tiene que cada persona tiene que vivir en Mindo.
Un poco de historia
El turismo en Mindo se inicien 1987 gracias a la iniciativa de la fundaci Amigos de la Naturaleza.
En 1988 la zona, que abarca 22 mil hecteas fue reconocida como Bosque Protector Mindo-Nambillo.
Un hecho que incentivo el crecimiento del turismo en la zona fue la construcci de la carretera Quito-Nambillo-Los Bancos.
De acuerdo al timo censo realizado en 1999 la poblaci urbana y rural de Mindo era de 2 mil 435 habitantes.
Seg Segundo Rom, de la Fundaci Pacaso Pacaso, hoy la poblaci estcreciendo debido al florecimiento del turismo.
Los precios
Visitas a la cascada de Nambillo
Extranjeros………………………….5.00 USD
Residentes…………………………4.00 USD
Estudiantes del exterior……..4.00 USD
Nacionales…………………………3.00 USD
Tercera Edad………………………1.50 USD
Nis…………………………………..1.00 USD
Viaje de 530 metros sobre una tarabita 5, 00 USD
Visitas al Mariposario
Adultos………..3.00 USD
Nis…………..2.00 USD
Regatas de tubing en los rs Mindo (3 kiletros), Cinto (7 kiletros) y Blanco (22 kiletros) cuestan desde 4,00, 10,00 y 22,00 USD dependiendo el recorrido
Los precios de las comidas van desde los 2.00 USD hasta 10 USD
Gus para recorridos de aviturismo desde 25 a 30 dares para grupos mimos de seis personas
Alquiler de bicicletas……..1,20 USD la hora
Cabalgatas……………………3,00 dares la hora
Hospedaje
En Mindo existe un promedio de 60 sitios de hospedaje, entre hoteles, casonas, y hosters.
Los precios varn desde los 8 hasta los 100 dares dependiendo de los servicios que se ofrezcan.