Redacción ESMERALDAS
«A ese señor ‘Guacho’ solo lo conozco por la foto que estaba junto a un policía en una hoja que lanzó un helicóptero que volaba bajito por mi casa (parroquia Ricauter, cantón San Lorenzo)», así lo asegura, Emérita Klinger, mamá de uno de los prófugos que estarían vinculados al grupo disidente Oliver Sinisterra, liderado por Walter Arizala, alias Guacho.
En cambio, a Noralba Arroyo, hace siete meses le detuvieron a su hermano, en Ricauerte, bajo la orden de Fiscalía que sospecha que los detenidos (27) se organizaron para delinquir. Hoy en Esmeraldas se realiza la audiencia preparatoria a juicio a través de vídeo conferencia.
«No me da vergüenza hablar del tema de ‘Guacho’, porque mi hermano (el detenido) es inocente, expolicia municipal y epiléptico. En la cárcel de Latacunga donde está detenido, hace mucho frío, y él ha sufrido 10 ataques epilépticos. No es justo que nos afecten porque somos pobres», criticó con molestia la mujer.
Adelantó que irán hasta los representantes de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) para que les ayuden con la investigación «y no se siga vulnerando los derechos humanos de nuestros familiares».
Asegura Noralba que conoció a ‘Guacho’ por televisión. «Los pueblos de San Lorenzo como Ricauter y Mataje son de paz», repetían familiares de un grupo de detenidos que llegaron hasta la Unidad de Vigilancia Comunitaria (UVC) de Esmeraldas donde virtualmente se procesa a sus parientes.
Al grupo de Oliver Sinisterra se lo vincula con el secuestro y muerte de periodistas, civiles, también de militares en emboscada.
A las acciones violentas se sumarían atentados con explosivos a instalaciones policiales y militares. Además del intento fallido de tumbar una torre eléctrica en la parroquia Viche del cantón Quinindé.
