ESMERALDAS
No midió su fuerza y lo golpeó con un plalo en el brazo izquierdo. Sobre la piel del protestante quedó la marcado el pedazo de madero extraído de la vegetación que rodea a ‘Playa negra’, el sitio de conflicto entre los comuneros de Mompiche, cantón Muisne al sur de Esmeraldas y los extrativistas.
Los que se enfrentan son vecinos del cantón. Otros defensores de la naturaleza llegaron de turismo y se enamoraron del lugar donde arena negra no solo le da un estatus turístico al lugar, sino que es el ‘iman’ para los dueños de cementeras motiven a los mineros a seguir explotando en la zona, donde un estudio de la Escuela Politécnica Nacional hecho en 2014 determinó que hay hierro y titanio.
Son dos grupos que se encuentran al frente de la extracción: El Ostional y El Mirador, ambos fueron clausurados por los entes de control, pero volvieron con sus tractores, volquetes y camiones a movilizar toneladas de la arena.
Los activistas en dos ocasiones paralizaron la movilización del producto y lo desembarcaron en las calles del pueblo turístico donde el asfalto todavía no reemplaza a la tierra de las calles. Tampoco tienen agua potable ni alcantarillado que garantice el buen vivir.
Y es justo el buen vivir que buscan el grupo que se opone a la extracción de la arena negra, argumentan que si se van los extrativistas llegarán más turistas internacionales a surfear, a caminar por los senderos montañosos y a dinamizar la economía de un poblado donde el 90% depende del turismo. Los demás se van a pescar o al campo.
Pero por ahora, los enfrentamientos son la tónica junto al mar, unos en tractores cumpliendo la orden de sacar arena y otros dispuestos incluso si recibir golpes y a vivir con las amenazas a cambio de tener una playa libre de la extracción de la arena negra. (MGQ)