La Av. El Inca, que une a los barrios de San Nicolás con Fajardo, en el Cantón Rumiñahui, se inunda cuando llueve. El sistema de drenaje no funciona porque está lleno de lodo, piedras y maleza. El adoquín empieza a levantarse en varios tramos.
Fátima Muñoz, moradora del sector, mientras esperaba el bus de transporte público para ir al centro de Sangolquí comentó que los aguaceros han puesto a prueba a esta vía por la que transitan todo tipo de vehículos.
Se trata de una calle separada únicamente por el río San Pedro, donde opera un puente para facilitar el paso de los moradores. Ellos cuentan que esta vía era de tierra y luego fue adoquinada, pero no ha durado mucho.
Para poder abordar el bus, Muñoz tuvo que primero alejarse de la parada que estaba llena de agua estancada. Su preocupación es el estado de la vía porque en los últimos días se ha levantado el adoquinado, se han formado huecos.
Al ver el agua empozada, se pensaría en que hay inconvenientes con el sistema de alcantarillado; sin embargo, la sorpresa fue ver uno de los sifones completamente limpio. “El problema es que el adoquín no ha sido bien compactado y con el paso de los carros se han formado camas”, mencionó Muñoz.
Otra madre de familia, Carmen Cuenca, dijo que el problema es que por esta calle transitan camiones que van a las fábricas cercanas, buses, volquetas y hasta tráiler. Añadió que este sitio a su criterio es un relleno porque no está muy distante del río.
La calle se une con la Av. General Enríquez, una de las arterias viales importantes del cantón porque atraviesa por la mitad del poblado. En todo el trayecto, la Av. El Inca presenta un similar situación: las cunetas llenas de maleza, tierra y lodo y la calle con adoquines que se mueven como gelatinas. (PSD)