Informe revela el preocupante índice de sobrepeso y obesidad en la provincia de Loja, alcanzando un 6,4%. El análisis detallado del año 2023 muestra las distintas causas que contribuyen a esta problemática.
La obesidad y el sobrepeso han emergido como problemas de magnitud global, afectando a más de tres millones de personas en todo el mundo. En particular, la preocupante tendencia al alza entre niños y adolescentes ha llevado a que la comunidad internacional considere estas condiciones como una prioridad de salud pública. Datos recientes de la encuesta Steps, realizada por el Ministerio de Salud Pública, revelan que estas problemáticas afectan con mayor prevalencia a las mujeres, alcanzando un 30,9%, en comparación con el 20,3% registrado en hombres.
Ligia Briceño, especialista en obesidad y comorbilidades, destaca la evolución en la percepción de estas afecciones en la última década. Anteriormente ignoradas, ahora se reconocen como enfermedades crónicas. “Las personas que llegan a este punto, y en un gran porcentaje, se debe a la ausencia de alimentación balanceada y llevar una vida sedentaria, producto de ser dependiente de los aparatos tecnológicos”.
Aunque patrones genéticos o alteraciones metabólicas también pueden desencadenar la obesidad en algunos casos, estos representan una minoría de los pacientes.
Responsabilidad
Esta enfermedad se presenta actualmente desde los primeros años de vida, por ello, el entorno familiar tiene un papel crucial en fomentar prácticas alimenticias saludables y promover la actividad física. Advierte contra el hábito de ofrecer productos altos en azúcares o grasas saturadas a cambio de tranquilidad. “Debemos evitar esta mala práctica (…) a cambio de que deje de llorar o molestar. Otro error que cometemos es cuando damos dispositivos electrónicos a la hora de la comida, esto generará que, por estar pendiente a la pantalla, terminarán su plato y aún seguirán con la sensación de tener hambre».
Además, destacó la necesidad de educar sobre la interpretación de las etiquetas de alimentos, utilizando el semáforo nutricional como herramienta en las instituciones educativas. “En las escuelas y colegios, se deben abordar estos temas, como lo venimos realizando desde el Ministerio de Salud Pública. Es verdad, aún nos falta involucrar más a la gente, porque a pesar de que ven la etiqueta, lo siguen consumiendo. Es ahí donde debemos articular esfuerzos para fomentar una cultura saludable y, a su vez, exigir a las grandes industrias entregar productos sanos y libres de elementos nocivos para la salud”.
Riesgos
La obesidad y el sobrepeso conllevan alteraciones metabólicas que, a largo plazo, pueden desencadenar hipertensión, diabetes y enfermedades cardiovasculares. También se asocian con problemas físicos, como daño en las articulaciones y osteoartrosis, que afectan la movilidad. A nivel psicológico, estas condiciones pueden generar problemas de autoestima, depresión y distorsión de la imagen corporal. “Es importante irlo trabajando a tiempo con las personas que sufren de este tipo de alteraciones”.
Acciones
Desde el Ministerio de Salud Pública, se desarrollan diversas acciones para abordar la obesidad a través de sus unidades de salud. Además de promover buenas prácticas en establecimientos educativos, donde se imparten charlas y conferencias sobre loncheras saludables, nutrición y actividad física en beneficio del crecimiento y desarrollo.
En el ámbito de atención, se trabaja con una guía nutricional. “Aquí les indicamos que las rutinas deben ir acorde a su índice de masa corporal, con la finalidad de evitar exponer a la persona, con esta problemática, a ejercicios de alto impacto que pueden ocasionar daños en sus articulaciones tanto superiores como inferiores”.
Cifras
Según el último reporte del Programa Mundial de Alimentos, la provincia de Loja registra un índice de sobrepeso y obesidad del 6,4%, con un mayor número en su cantón principal debido a la cantidad de habitantes. Durante el 2023 las métricas se han desarrollado de la siguiente:
