Carnaval en los barrios de la ribera

DIVERSIÓN. Las piscinas ocupan las estrechas calles de diferentes barrios de la ribera del Esmeraldas.
DIVERSIÓN. Las piscinas ocupan las estrechas calles de diferentes barrios de la ribera del Esmeraldas.

Caminar por los barrios de la ribera de Esmeraldas, es encontrarse con las piscinas armables de diferentes tamaños, colores y modelos que ocupan los portales o las aceras de las calles. Es ahí donde los niños se divierten, mientras los adultos se agrupan en las esquinas a libar, jugar, bailar o simplemente a supervisar a sus hijos.

Alejandra Mina, es una madre de familia, que con antelación ahorró algo más de 100 dólares para comprar la piscina para sus dos hijos pequeños, para ella es la forma de hacerlos divertir en las fiestas de Carnaval, porque tampoco dispone de dinero extra para llevar a sus cuatro hijos a pasear a una playa o a un río, porque gastaría más, además, quiere protegerlos del contagio del virus, debido a que tendrían que movilizarse en transporte público, donde a su criterio, no se cumplen con las normas de bioseguridad.

Pero también está el grupo que no teme a la pandemia y se reúne para vivir al máximo las fiestas carnestolendas sin mascarilla y sin distanciamiento social. Toman del mismo vaso y bailan en espacios abiertos o cerrados. (MBC)