¡Hola amigues!

Ángel Polibio Chaves

No estimado lector, no es un error de impresión, es una forma revolucionaria de superar el discrimen odioso de género que impone la anticuada gramática de la lengua castellana; por lo menos así me explica una carta que ha tenido a bien dirigirme el CDDC (Colectivo de Depredadores y Depredadoras del Castellano), que tiene el siguiente tenor:

“Nada estimado editorialisto: Por esta única y última ocasión (estupenda palabra que nos liberó del problema de definir si “vez” es masculino o femenino), conocedores que es uno de los último retrógrados que encuentra inadecuada nuestra renovada sintaxis, nos dirigimos para informarle que a pesar del gran esfuerzo desplegado por quienes redactaron la Constitución de la República de Montecristi y otros cuerpos legales, nos hemos propuesto advertirle que no toleraremos que Usted y felizmente un pequeño grupo de limitaditos mentales, continúen cerrando el paso a la innovación de la lengua castellana, pues hemos estado atentas y atentos a los poco adecuados reparos que de su parte mantienen en contra del lenguaje inclusivo.

Sepa de una vez que las estudiantas y los estudiantes que pertenecen a nuestro grupo de avanzada, están pendientas y pendientes de cualquier intento por detener el avance incontenible de la razón y la justicia que nos permitirá superar siglos de dominación machisto, a las que han estado sometidas nuestras sociedades, que, por gentes como ustedes, han postergado los afanes igualitarios de los seres y las seras humanas. Es más, en un despliegue inusitado de imaginación y buen gusto, hemos descubierto que aún la identificación de género con el uso de la “o” o de la “a”, no es adecuada, por lo que ahora, cuando queramos expresar neutralidad, en una palabra, ya no usaremos ni las mencionadas vocales, sino la “e”. Con atente salude, CDDC. “.

Huelgan los comentarios; quedamos sin embargo advertidos.