Sobre el fraude en EEUU

Inmersos como estamos en las trifulcas de nuestras elecciones, no hemos dado importancia a un artículo aparecido hace unas tres semanas en la conocidísima revista Time. Como es comprensible, nuestros criollos sostenedores de Harris, digo de Biden, ni han topado el asunto, porque arde.

El texto en cuestión lleva por título: «La historia secreta de la campaña en la sombra que salvó las elecciones de 2020»; en él se afirma sin ningún pudor algo tan grave como lo siguiente: «toda una cábala bien financiada por personajes poderosos que abarcaban diversas ideologías y sectores económicos y que colaboraron tras bambalinas para influir en las percepciones, cambiar reglas y leyes condicionando la cobertura informativa y controlando el flujo de noticias». Las palabras no tienen desperdicio, pues resumen de manera elegante lo que hicieron los demócratas y sus aliados para tergiversar los resultados de las elecciones. El avisado lector ya se habrá dado cuenta de cada detalle.

El articulista señala que “todo fue muy extraño”, sobre todo porque antes de que se hubiese finalizado el conteo de votos en varios estados fundamentales ya la gran prensa progresista había declarado al ganador de manera orquestada (en otro ámbito fuimos testigos de que decenas de comentaristas de TV empleaban idénticas frases para señalar el triunfo de Harris (Biden) y denostar a Trump).

La guinda del pastel viene ahora: “En cierto sentido, Trump tenía razón”, se entiende por denunciar el fraude más grande de la Historia, como ya lo había pronosticado Biden, esta vez sin Harris.

Y ¿quiénes habrían sido los perpetradores de tamaña trampa? Responde el cínico autor del texto de marras que lo hicieron “activistas de izquierda”  coludidos con “titanes de las grandes empresas”. Más claro, el agua.

Sin embargo, hay más: hace pocos días FoxNews transmitió una charla del político comunista chino Di Dongsheng en la que afirma que ellos “tienen gente en lo alto“ del poder de los USA y que la familia Biden “está comprometida” con los intereses chinos. Sin más comentarios.