Leoncio Chamba, un productor que habita en la parroquia San Andrés del cantón Chinchipe, con apoyo de los técnicos del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) ha convertido su predio en una finca integral, en donde posee diversidad de productos enfocados en la acuacultura, ganadería, y hortalizas. Ahora, su reciente actividad es la producción de tomate de mesa.
Chamba comenta que decidió emprender en el cultivo de tomate gracias a la motivación del técnico del MAG, y en la actualidad ve excelentes resultados en su producción. Indica que esta actividad, además, le permite generar fuentes de trabajo ya que para el mantenimiento contrata mano de obra de la localidad.
El manejo técnico del cultivo es natural. Usa abonos naturales, orgánicos que le enseñaron a elaborar los técnicos. El cultivo se encuentra próximo a la cosecha y estima una producción de 10 cajas de 45 libras cada una, las cuales serán comercializadas en los sectores Zumba y Jimbura, con compradores que prefieren los productos que genera en su finca integral.
«Son actividades innovadoras en nuestro sector; fui el primero en tomar la decisión de emprender en este cultivo con el apoyo del MAG, ahora otros compañeros productores de la localidad han visto los resultados y quieren sembrar, y me alegra que hayan tomado la decisión de optar por nuevos cultivos», indica el productor.
Bayron Zari, técnico del cantón Chinchipe, manifiesta que las condiciones climáticas y del suelo son excelentes para la producción de cultivos protegidos. «Los resultados que se obtiene en este sector no se podría tener en ningún otro lugar de la provincia; son resultados excelentes en productividad y calidad», expresa.
Zari trabaja con los productores interesados en establecer cultivos protegidos y en las reuniones los motiva para que opten por una producción alternada, «para que tengan un variedad de producción y beneficios de la agricultura». (JGN)