Luego de un año y cuatro meses de que se entregó la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales de Ambato (PTAR), construida en el sector ‘Las Viñitas’, esta ya rinde sus primeros resultados.
La descontaminación del río Ambato es uno de ellos. Hasta 2018 la Jefatura de Gestión Ambiental y Desarrollo Minero del Municipio de Ambato, indicaba que sus aguas registraban un 83,64% de contaminación desde El Socavón hasta el afluente del río Pachanlica.
Esto debido a las descargas de aguas residuales que ingresaban sin tratamiento al afluente.
Actualmente esta realidad ha cambiado, según los técnicos estas aguas ya pueden ser usadas para regadío sin ningún problema.
El Dato 22 personas técnicas y operativas trabajan permanentemente en la planta de tratamiento.
Logro
Samuel Haro, jefe de planta de Las Viñitas, explicó que, a través de un proceso biológico, se trata las aguas domésticas para devolverlas al río de acuerdo a los parámetros aceptables que dicta la normativa ambiental vigente.
El técnico aseguró que los parámetros son mucho más bajos de los que se tenía al inicio del diseño de la planta, “es decir que estas aguas incluso sirven para agua de riego”, dijo.
Haro explicó que la carga de contaminación con la que ingresan las aguas, a la planta de tratamiento, es de 600 miligramos por litro de demanda biológica de oxígeno (DBO) y luego del proceso estas aguas salen con apenas 40 miligramos por litro de DBO.
“La normativa del Texto Unificado de Legislación Secundaria de Medio Ambiente (Tula) nos da los límites permisibles para que las aguas retornen al río. Estos es de 100 miligramos por litro de DBO, es decir estamos con un alto grado de eficiencia de descontaminación”, aseguró.
Cifra: Un millón y medio es el presupuesto de la Emapa que se requiere para el funcionamiento de la planta.
Proceso
A la planta llegan las aguas domésticas, y de algunas industrias, a través de los diferentes colectores que tiene la ciudad.
Allí se cumple una serie de fases de purificación hídrica, entre ellas sedimentación primaria, recirculación, almacenamiento de lodos, digestión anaeróbica, captación de gases y deshidratación de fangos residuales.
A decir de Haro, una vez que se desarrolla todo el proceso biológico, las aguas son sometidas a cloro gas, donde se garantiza que cumplan con los parámetros exigidos.
Antecedentes
La obra fue gestionada desde hace varias administraciones, pero se cristalizó en 2016 cuando se aprobó una inversión de alrededor de 26 millones de dólares para su construcción.
El proyecto se ejecutó con los plazos establecidos y en 2020 se entregó la obra ya en funcionamiento con una inversión total que se acerca a los 32 millones de dólares de los cuales una parte fue financiada con un crédito extendido por el Banco de Desarrollo.
Al frente de la obra estuvo el Consorcio Saneamiento PTAR Ambato, constituido por la empresa española Aqualia y Constructora Alvarado, quienes además administraron la planta hasta este mes de junio de 2021.
Este lunes 28 de junio las autoridades de la Municipalidad de Ambato y la Empresa Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (Emapa), informaron que asumen la administración.
Javier Altamirano, alcalde de Ambato, aseguró que estas aguas residuales domésticas e industriales tienen un tratamiento técnico adecuado lo que permite la reactivación de la cuenca del río Ambato.
“Es una propuesta integral que nos permite mejorar las condiciones de vida de la colectividad ambateña”, finalizó. (FCT)
Beneficio
Luis Manobanda, se dedica a la agricultura en la cuenca baja del río Ambato para él, hace algunos años, era evidente la contaminación con la que llegaba el agua a sus cultivos, pues el suelo quedaba con olores e inclusos colores.
Ahora asegura que ya no es así. “Incluso algunas plantas no soportaban y morían, pero ahora se puede sembrar con libertad, sabiendo que ya no está contaminada”, dijo.