Tungurahua le apuesta al turismo rural y comunitario

Aporte. Varias son las actividades que se pueden realizar en el turismo rural y comunitario.

El turismo es uno de los sectores que se vio más afectado por la pandemia por el Covid-19. El incremento de contagios y la saturación de hospitales dieron paso a un ajuste a las medidas de control sanitarias que restringen la libertad de movilización y por ende a las visitas a lugares turísticos.

 Sin embargo, luego de más de un año de medidas restrictivas son los sectores rurales los preferidos para visitar, tanto por los propios habitantes de las localidades como por viajeros nacionales y extranjeros.

Por ello se busca aprovechar y potencializar la belleza natural y rural de Tungurahua.

La provincia permite que cada uno de sus rincones, en los nueve cantones, se conviertan en sitios atractivos para recorrer y en los cuales se puedan desarrollar diversas actividades, desde caminatas hasta deportes extremos.

Con esa visión se está impulsando el turismo comunitario, así lo asegura María Eulalia Castellanos, técnica de turismo del Gobierno Provincial de Tungurahua.

De acuerdo con la técnica, son cientos de emprendimientos rurales que se han integrado a la ruta agroecológica y turística que maneja la institución, pero también se suman comunidades y asociaciones que han iniciado las gestiones para generar turismo comunitario.

Iniciativa que impulsa el desarrollo

Castellanos aseguró que el proceso que solicitan varios sectores rurales, para ofrecer turismo comunitario, es bastante complejo puesto que se debe cumplir una serie de requisitos.

Pero sin duda el más importante es la organización comunitaria, pues a diferencia de los emprendimientos privados de servicio turístico en el sector rural, este debe generarse con toda la comunidad.

Agregó que luego de contar con una organización fortalecida se desarrollan varios procesos, entre ellos diagnóstico, evaluación y potencialización de lo que se ofrece en tal o cual sector.

“Los sectores son diversos, unos pueden contar con riqueza natural, otros cultural e incluso de producción”, dijo al asegurar que en cualquier caso el turismo comunitario aporta al desarrollo de las localidades por ello varios sectores están interesados.

DATO 
Varios servidores turísticos rurales de la provincia cuentan con el sello de lugares bioseguros.

 

Interés

Uno de los sectores que ya cuenta con una autorización de turismo comunitario está en Pondoa, en Baños de Agua Santa.

Otros sectores han iniciado ya su proceso, entre ellos Llangahua al oeste de Ambato, en la vía a Guaranda donde de a poco van cumpliendo ciertos requerimientos para ofrecer una alternativa a los visitantes.

Mientras que en el cerro Tzunantza una asociación impulsa el inicio de este proceso. Lo mismo ocurre en sectores como Tisaleo, la parroquia Quinchicoto, así en todos los cantones.

Aporte

Mercedes Tisalema, de la Asociación Jaime Roldós, explicó que llevan trabajando en conjunto desde noviembre del año pasado a fin de impulsar el turismo comunitario.

La dirigente aseguró que en el lugar se implementaron senderos, cabañas, espacios de distracción y además cuentan con un mirador espectacular, pero sobre todo con el trabajo comunitario de la cultura Tomabela.

Para ella, si bien es un proceso bastante fuerte, asegura que ha fortalecido el trabajo mancomunado, por lo que invito a los sectores a trabajar en conjunto para desarrollar sus localidades. (FCT)