Conozca los beneficios de la ortiga.

Atención. La planta tiene propiedades para fortalecer el sistema inmune.

“Dentro de la cosmovisión indígena las plantas son sumamente importantes, no solo de nuestra alimentación sino también de nuestra salud”, dijo Dora Malisa, estudiante de enfermería.

Así utiliza la ortiga como planta medicinal desde hace miles de años. Esta contiene vitaminas, flavonoides, minerales y oligoelementos. Estas propiedades han hecho que se la utilizara para los trastornos digestivos, la anemia, el reumatismo, los problemas dermatológicos y hasta la astenia.

EL DATO
Las semillas de la ortiga presentan un efecto laxante bastante directo, 
y si se toman en gran cantidad (más de 15 o 20) pueden ejercer un 
efecto purgante fuerte y nada deseable.

 

Beneficios

La ortiga puede estimular la inmunidad y la regeneración celular.

Favorece la eliminación de cloruros, ácido úrico y urea con la orina, por ello se recomienda en caso de hiperuricemia, gota y para bajar la tensión arterial como antihipertensivo.

Las hojas y los tallos contienen calcio, hierro, magnesio, potasio, azufre y zinc.

También aminoácidos esenciales, flavonoides, serotonina y ácidos orgánicos.

La ortiga presenta propiedades remineralizantes gracias a los minerales y oligoelementos presentes en sus hojas.  El hierro, otro componente de esta planta, es un tratamiento eficaz para prevenir o combatir la anemia.

 

Detalles. Los expertos recomiendan no beber más de tres tazas de infusión de ortiga al día repartidas a lo largo del día.

Las propiedades diuréticas de esta planta ayudan, además de eliminar líquido, para contrarrestar los efectos de enfermedades como la gota, la artritis o los cálculos renales. También se han llegado a utilizar las propiedades de la raíz de la ortiga mayor para combatir algunos trastornos de la micción, como el deseo incontrolable de orinar o las molestias urinarias producidas durante la noche.

Es un remedio herbolario para el tratamiento de la inflamación vaginal, aplicado en forma de irrigaciones.

Por vía externa, la ortiga en decocción, lavados o en friegas se usa para el tratamiento de la dermatitis seborreica y para prevenir la caída del cabello.

También se usa de forma tradicional, para aliviar los dolores articulares y musculares, por su alto efecto rubefaciente, pero hoy día tal aplicación está en desuso.

“Yo sufría de migrañas, pero empecé a ortigarme la cabeza y aunque parezca mentira las migrañas desaparecieron”, dijo María Jurado, maestra jubilada.

 

TOMEM NOTA
Los expertos recomiendan no beber más de tres tazas de 
infusión de ortiga al día repartidas a lo largo del día.

 

Cómo consumirla

En farmacias y centros naturistas puedes encontrar desde extractos de ortiga hasta aceites o comprimidos de esta planta.

La presentación más popular es la infusión o las cápsulas, todas tienen contraindicaciones en mujeres embarazadas o en etapa de lactancia.

Los tratamientos a base de ortiga no suelen ser de más de tres semanas de duración, siempre acompañados del asesoramiento médico y profesional.

Los expertos recomiendan no beber más de tres tazas de infusión de ortiga al día repartidas a lo largo del día.

 

TOME NOTA 
La ortiga se utiliza para reducir edemas y para combatir 
el sobrepeso originado por retención de líquidos.

 

Si prefieres el extracto o polvo de ortiga, se recomienda mezclar en un vaso de agua o en un yogur una cucharada pequeña.

Puede tomarlo de esta manera durante el desayuno y por la tarde, antes de la cena.

Adicionalmente, la ortiga se puede incluir en una gran variedad de platos: desde sopas hasta ensaladas y bebidas. Por ser urticante se recolecta con guantes, después hay que hervirla unos instantes y ya está lista para cocinar.

 

Características

La ortiga, una planta que crece de forma silvestre y que cuenta con muchas propiedades beneficiosas. Conocida también como ortiga mayor, picante, la ortiga es una planta que suele tener entre 40 y 100 centímetros de altura. Posee un tallo muy ramificado, con hojas opuestas que florece durante los meses de junio a octubre. Es una planta de zonas templadas y húmedas y puede encontrarse en todo el mundo, aunque abunda en Europa.