La expectativa y los criterios divididos crecen entre la ciudadanía luego de conocer que, a partir de este 7 de junio, se tiene previsto el retorno progresivo de los estudiantes a las aulas.
En Tungurahua 39 escuelas son parte de este plan y según las autoridades son los padres de familia quienes solicitaron esta medida.
Pero hay quienes aseguran temer aún por la salud de los niños, mientras que desde organizaciones internacionales advierten las brechas que se siguen agravando en la educación.
Realidad
Para Gustavo, de 9 años de edad, la educación es una forma de ‘tortura’, por ello ya no quiere continuar.
Él se levanta a las 06:00 para tratar de desayunar algo que le prepara su madre y salir presuroso en busca de un lugar donde puedan prestarle internet.
“Hoy me toca ir a la casa de un compañero”, comenta mientras toma su bicicleta, una maleta con pocos materiales, pero llena de inocencia e ilusiones.
Gustavo, es uno de los cientos de niños que no cuentan con internet para trabajar normalmente en la educación en casa obligada por la pandemia.
Aun así, sus padres registran a su hijo como si tuvieran internet, aseguran que el año lectivo anterior dijeron que no tenía y las guías pedagógicas nunca llegaron.
“Por eso ahora decimos que sí tenemos internet y nos toca buscar a dónde mandarlo a recibir clases”, comentó su madre.
Aseguró que hay días que no se conecta porque los vecinos o la gente que le ayuda ya no lo quieren recibir.
Sin embargo, no todos los padres piensan lo mismo, pues hay quienes mencionan que la medida es apresurada y no se está pensando en el bienestar de los niños.
Ese es el caso de Ricardo Tisalema, quien asegura que no va a enviar a su hijo a clases. “Los maestros están vacunados, pero los guaguas no, a ellos en la escuela cómo se los controla que no convivan de cerca con sus compañeros”.
El criterio es el mismo de Gabriela Jácome, que menciona que por más medidas que se tomen con los niños, en los buses y en la escuela va a ser muy difícil que se mantengan las medidas de bioseguridad para evitar que los estudiantes se contagien.
TOME NOTA Los Ministerios de Educación y Salud harán evaluaciones cada 15 días evaluar el resultado del regreso a clases.
Cifras
De acuerdo con datos del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), en Ecuador alrededor de 90 mil estudiantes ya están fuera del sistema educativo.
Además, se advierte que alrededor del 15% de estudiantes afirman no haber tenido un contacto habitual con sus docentes en varias semanas.
Hay que tomar en cuenta que en muchas ocasiones la conectividad es deficiente y solo dos de cada 10 estudiantes cuentan con equipos para su uso personal.
A nivel global también se evidencia que, a causa de la falta de interacciones diarias con sus compañeros y la reducción de la movilidad, los niños están perdiendo su forma física y su salud mental se ha visto afectada.
En Ecuador, cuatro de cada 10 adolescentes afirman haberse sentido angustiados o muy tensionados desde el inicio de la pandemia.
Criterios
Gissela Rodríguez, psicóloga educativa, indicó que la situación en el sector rural es bastante compleja para continuar en la educación virtual.
Y no solo en la ruralidad, sino también en los estudiantes de familias marginales de la ciudad quienes no cuentan con recursos para la educación en casa.
“Hay ya un gran retroceso en la educación, en el desarrollo cognitivo, en el desarrollo integral y el aspecto emocional”, dijo.
Para la psicóloga si bien es cierto hay familias que no están de acuerdo con el retorno a las aulas, hay que recordar que este retorno es progresivo y voluntario.
“Nadie está obligado a enviar a sus hijos a clases, al contrario, se da pie a que sea una decisión de los padres de acuerdo a sus posibilidades, a sus recursos y convicciones”, dijo.
Para Pablo Poveda, fundador de la Clínica de Derechos Humanos Alli Kausay, hay comunidades y parroquias que no tienen casos de contagio o por lo menos no es masivo, es allá donde debe apuntar esta propuesta.
“En las comunidades y con un retorno progresivo se garantiza un cierto grado de seguridad comparado con los ámbitos urbanos”, dijo.
Añadió que los padres de familia deben ser corresponsables con el cuidado y la prevención ante el covid, ya que la posición de retorno a clases se contrapone con la realidad en la que los niños y adolescentes salen a reuniones, paseos, de compras y no se dice nada al respecto.
Diego Tuquerez, presidente de la Asociación de Profesionales de la Educación de Tungurahua, manifestó que es importante que se retome la educación presencial para quienes no logran una conexión.
“Hay que preguntarse si hemos madurado, si somos empáticos, si estamos preparados y hemos enseñado a nuestros hijos las normas de comportamiento básicas que ahora se han regularizado”, dijo al tiempo de enfatizar que la cultura del hogar es preponderante en este retorno a las aulas.
También aseguró que en el retorno progresivo deberá ser una labor de las autoridades el vigilar el cumplimiento de las medidas de bioseguridad y los protocolos que las instituciones presentaron para que sean consideradas en este retorno. (FCT)
Ministerio de Educación
María Brown, ministra de Educación, explicó que son 15 mil 135 instituciones educativas a nivel nacional que han presentado su Plan Institucional de Continuidad Educativa (PICE).
De estas al menos 5 mil 89 han solicitado el retorno a alguna forma de presencialidad con aforo reducido.
Al final solo mil 301 planes fueron aprobados por lo que serán en estas escuelas que se retomará la presencialidad de forma progresiva y voluntaria.