Las personas que se contagian de covid-19 y sus familiares afectados por el aislamiento deben recibir apoyo y atención psicológica, sin embargo, los recursos y la misma situación de confinamiento son limitantes para muchos hogares.
Pero hay actividades que pueden hacerse dentro del núcleo familiar, como parte de esta autoayuda que se requiere para salir de la crisis en la que se encuentran.
Para el psicólogo Javier Escobar, se debe tomar en cuenta que la familia es un engranaje y al momento que un miembro se contagia, este puede descomponerse debido a los trastornos que aparecen o quizá ya los tiene y se alteran gravemente.
Ya enfocado en el apoyo al paciente, el especialista dice que lo primero es informarle sobre normas de aislamiento para que sea más cómodo dentro de su espacio (higiene, alimentación, disciplina, orden, uso de mascarilla, etc).
En lo sicológico, la persona debe tener una ‘ventilación de emociones’ , es decir debe expresar todo lo que siente (miedo, angustia, ansiedad, tristeza).
El cuidador puede hacer esto por medio del teléfono aunque esté dentro de la misma casa para evitar contacto directo.
Comunicación directa
Una de las formas de evaluar al paciente es preguntarle cómo visualiza esta crisis y cuál cree que es la solución al problema mientras lo supera.
Esto sobre todo en personas que no tienen mayores complicaciones para hablar, moverse o lograr esta interacción. El tipo de gravedad del paciente influye para realizar estas actividades.
Mediante la comunicación con el paciente se busca hacerle comprender que el estado será transitorio, pues muchas veces el ánimo baja tanto que inconscientemente sienten morir y la idea es no quedarse con esos pensamientos.
Tanto familiares como, el enfermo deben tomar en cuenta que la recuperación es multidisciplinaria es decir la medicina, psicología y fisioterapia no pueden faltar bajo ninguna circunstancia al momento de la recuperación.
Contacto familiar
Aunque los recursos sean limitados y la parte psicológica profesional sea la menos probable de obtener en muchos casos, el contacto con los familiares y seres queridos es importante al punto que no debe romperse, pues esta es una garantía de sobrellevar el aislamiento físico recalcó Escobar.
El cuidador del enfermo, así como sus amigos y allegados deben motivar al paciente todos los días para que su estabilidad emocional se mantengan y así su sistema inmunológico no decaiga y solo se logra con acompañamiento contínuo.
En el caso de ver que el paciente no pueda manejar su situación y caiga en depresión necesariamente debe ser asistido por un especialista para que sus trastornos no trasciendan.
Actividades recreativas
La familia no debe olvidar las actividades que mantenga ocupada la mente como opciones lúdicas, juegos online, o cualquier recreación dentro de casa para que la realidad sea más llevadera conscientemente entre todos los miembros de la familia, incluido el paciente.
La pandemia de COVID-19 es una amenaza de gran proporción tanto para la salud física como para la salud mental y el bienestar de sociedades se han visto gravemente afectadas por esta crisis, siendo esta una prioridad que debe abordarse con urgencia, según la Pan América Healt Organization (PAHO) (CNS)