Tres años de cárcel para un pornógrafo en Ambato

El hombre fue judicializado y liberado en primera instancia, pero luego fue recapturado y sentenciado.
ARCHIVO. El hombre fue judicializado y liberado en primera instancia, pero luego fue recapturado y sentenciado.

Marcelo E. recibió tres años de cárcel tras ser acusado del delito de pornografía infantil.

Este martes 6 de diciembre de 2022 se llevó a cabo la audiencia de juzgamiento en la que el Tribunal de Garantías Penales de Tungurahua conoció los pormenores del hecho en el que se supo, el acusado se hacía pasar por mujer en Facebook para obtener contenido sexual de una menor de edad.

La materialidad del ilícito fue demostrada por el Fiscal, quien contó con los elementos de convicción necesarios, previamente recabados por agentes policiales de la Unidad Nacional de Investigación Contra el Delito de Trata de Personas y Tráfico Ilícito de Migrantes (UNAT).

Al testimonio anticipado de una víctima se unieron una gran cantidad de fotografías sexuales tanto de la perjudicada como de otras niñas.

La cuenta falsa de nombre Karen N. era usada por el implicado y por la que la afectada de 12 años inició un chat en julio de 2021, hasta que el sujeto logró forzarla a replicar fotografías de carácter sexual de links que le enviaba.

Fue gracias a las diligencias investigativas de la UNAT se obtuvieron datos biográficos y de conectividad que llevó a los uniformados a dar con Marcelo.

Fue el 20 de mayo que la Fiscalía y en coordinación con la Policía Nacional allanaron la vivienda del sospechoso e incautaron dos computadoras que contenían material pornográfico infantil y un celular.

En primera instancia, el hombre llegó a la audiencia de formulación de cargos, pero extrañamente fue liberado, sin embargo, al poco tiempo se giró una boleta de captura en contra del ciudadano, pues no se explicaba la razón de que con toda la evidencia hallada en contra del sujeto se lo puso en libertad.

Una vez más y bajo la aplicación de técnicas operativas y de inteligencia policial, los agentes especializados de la UNAT lograron dar con el paradero de Marcelo, quien se escondía en Napo.

De ahí que fue devuelto a Tungurahua, hasta que finalmente se ejecutó el proceso penal en su contra, tipificado y sancionado en el artículo 173, inciso tercero del Código Orgánico Integral Penal (COIP). (MAG)