No hay sustitutos para maestros con covid

Varios niños buscan qué hacer pues no siempre tienen clases virtuales pues no suplen a sus maestros con covid.
Realidad. Varios niños buscan qué hacer pues no siempre tienen clases virtuales pues no suplen a sus maestros con covid.

Camila tiene 10 años, está en sexto de básica en una institución pública, desde el retorno a las clases presenciales estaba entusiasmada, sin embargo, su emoción decayó nuevamente pues las clases se suspendieron.

Esto ocurrió debido a que varios de sus profesores se contagiaron de covid y no había cómo suplirlos.

Esto no solo pasó en Tungurahua, pues esa realidad se replicó a escala nacional por lo que del 10 al 16 de enero de 2022 las clases en todo el sistema público se suspendieron.

La disposición del COE Nacional fue retomar las clases, de manera virtual el 17 de enero, sin embargo, Camila no pudo regresar a clases porque la salud de uno de sus maestros se complicó.

 

EL DATO
Los docentes son quienes más se contagiaron en las últimas 
semanas, mientras que en los niños el contagio es mínimo.

 

Información oficial

Ximena Loroña, coordinadora zonal 3 del Ministerio de Educación, explicó que se evidencia un preocupante panorama epidemiológico por el alto índice de contagios, sin embargo, en las aulas el porcentaje ha sido mínimo para los niños.

Pero la realidad no es la misma con los docentes, quienes sí se han contagiado en esta nueva ola de infección por COVID-19.

“En estas últimas dos semanas (a inicios de enero) tenemos alrededor de 45 docentes que se han contagiado dentro de la zona… es decir se duplicó el número de contagios en apenas dos semanas”, dijo.

Indicó que los docentes están en la capacidad de plantear estrategias que permitan abordar varios temas a fin de que el atraso no sea muy alto con respecto a la malla curricular que llevan en ese momento.

Para finalizar indicó que el aprendizaje en los niños es eficiente por lo que se generan técnicas con los docentes para que no exista el retraso.

 

Repercusiones

Sin embargo, esto es contradictorio frente a lo que sostiene un estudio publicado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, en el que se asegura que más de 100 millones de niñas y niños en el mundo quedarán por debajo del nivel mínimo de competencia en lectura.

Esto no es una alerta aislada puesto que expertos en educación y las mismas autoridades aseguran que hay por lo menos dos a tres años de retraso del aprendizaje.

 

Realidad local

Daniela tiene 7 años, la pandemia interrumpió su proceso de aprendizaje justo en los primeros años donde empezaba a conocer las letras y su interés por la lectura crecía.

Su madre cuenta que cuando terminó el año lectivo 2019 – 2020 la pequeña ya tenía un gusto especial por la lectura e incluso una afinidad con los libros. Posteriormente con las clases virtuales ese interés en lugar de crecer fue apagándose.

Hoy, aunque fue promovida a cuarto año de educación básica, no logra recuperar su aprendizaje y peor aún su pasión por los cuentos, las letras y los libros.

La realidad sigue siendo dramática para ella y su familia puesto que comenta que hicieron todo lo posible para que sea parte del retorno progresivo a las aulas.

Los expertos aseguran que la pandemia retrasó por lo menos tres años el proceso de aprendizaje de los niños y jóvenes.

Pues nadie estaba preparado para el cambio de la presencialidad hasta la virtualidad.

La educación a distancia en el país todavía es algo que no termina de acoplarse pues existen falencias como la falta de internet y recursos tecnológicos para acceder a las clases. (FCT)

 

Los expertos aseguran que existirían hasta tres años de retraso educativo a causa de la pandemia.
Problema. Los expertos aseguran que existirían hasta tres años de retraso educativo a causa de la pandemia.

 

 

Preocupación

Víctor Aldaz, coordinador de la Corporación para la calidad en Educación en Ecuador (Corpeducar), manifestó que existe un retraso pedagógico muy acentuado que al menos deja a los niños y adolescentes tres años atrás.

“Es tan clara la situación educativa o la emergencia educativa que se evidencia en las evaluaciones solo de los niños de escuelas particulares donde se han hecho ingentes esfuerzos en pedagogía, en sistemas virtuales de acompañamiento, no se diga en los niños de instituciones fiscales”, dijo.

Para el experto es importante e imprescindible que se desarrolle un ajuste curricular para priorizar el aprendizaje, dejando de lado cosas que se aprende pero que no sirven más adelante y que sigue siendo parte del pénsum de estudio.

 

Conectividad, un problema permanente

Tan solo cuatro de cada 10 hogares de Latinoamérica cuenta con conexión a internet.

Chile es uno de los países con mayores niveles de conectividad y solo alrededor del 57% de los hogares cuentan con conexión a red fija.

Para el sociólogo Vicente Ordóñez, este es un problema que ahonda todavía más la crisis educativa a causa de la pandemia por el COVID-19.

«El Gobierno no puede permitir que las clases sigan siendo en modo virtual si los niños no cuentan con la tecnología y conectividad que son necesarios para tener un mejor proceso de aprendizaje», sostuvo.

Añadió que esto trae un nuevo problema, la deserción escolar pues según datos del Ministerio de Educación en Tungurahua al menos 673 estudiantes habrían dejado de estudiar en el año lectivo 2020- 2021, mientras que a inicios del periodo escolar 2021-2022 se registraron 45 alumnos que han abandonado sus estudios.