Durante años, la plaza de Santa Clara se caracterizó por ser un centro de comercio agrícola, que funcionaba en la parroquia de Izamba.
Al paso del tiempo, el alto tráfico vehicular, la aglomeración, insalubridad y desorden que se visualizaban en el lugar, hicieron que al final el espacio colapsara.
Hace dos años, específicamente al inicio de la pandemia, las condiciones de la plaza generaron que fuera cerrada para evitar aglomeraciones y por ende contagios.
Desde entonces, los vendedores se apostaron en el sector de Guagracorral, sitio que fue observado por la Superintendencia de Ordenamiento Territorial al Municipio de Ambato, precisamente por no ser un espacio adecuado para la comercialización de productos.
“Se buscaron otras opciones, pero la que fue aprobada fue la de Yacupamba, esta obra beneficia entre 5 y 6 mil personas”.
Julio Rodríguez
DIRECTOR DE PLANIFICACIÓN DEL MUNICIPIO DE AMBATO
Ante la solicitud de la entidad a los funcionarios municipales, de desalojar este espacio, se iniciaron las labores, reuniones y estudios para buscar un lugar adecuado.
Por ello, un terreno con una extensión de aproximadamente 32 mil metros cuadrados, ubicado en el sector de Yacupamba, ha sido destinado desde la Municipalidad para ser transformado en una versión mejorada de la explaza de Santa Clara.
EL DATO El director de Planificación aseguró que la plaza podría extender hasta un 30% más el número de productores usuarios del nuevo espacio.
Oposición
Esta iniciativa generó reacciones a favor y en contra. Ayer centenares de personas se dieron cita en los exteriores del Gobierno Provincial de Tungurahua.
La razón es que, en una de las salas del lugar, se llevaba a efecto una reunión por parte de quienes dicen oponerse a este proyecto, al que habían sido convocados también representantes de los productores y comerciantes.
Luis Hernández, presidente del barrio Isidro Peñaherrera en Izamba y parte del conglomerado de presidentes de las urbanizaciones de la parroquia, aseguró que se estaban realizando las exposiciones del caso para llegar a un consenso y que el mercado no se construya en Yacupamba.
“Si Izamba tenía un mercado que se nos devuelva el mercado en nuestra misma parroquia, para que no pierda su capacidad productiva”.
Orlando Maliza Manobanda
PRESIDENTE DE LA COMUNIDAD DE QUILLÁN LOMA
“Como moradores no hemos sido escuchados. No estamos de acuerdo con la construcción, esto será un problema. Aquí tenemos siete unidades educativas, dos hospitales, y más de 5 mil habitantes”, dijo.
Y es que Hernández asegura que los productores necesitan de un espacio adecuado para su actividad pues, “se va a generar tráfico y por ende inseguridad e insalubridad porque no van a tener las condiciones adecuadas”, sostuvo.
Disputa
Orlando Maliza Manobanda, presidente de la comunidad de Quillán Loma, aseguró que es necesario contar con su propio mercado.
“Este es el pedido que realizamos desde el sector agrícola de Izamba, queremos que se respete nuestra necesidad. Cubrimos el 75% de la producción que se distribuye a nivel nacional. Estamos abiertos a compartir criterios técnicos y encontrar una solución, pero el mercado debe quedarse en Izamba”, manifestó.
Con carteles en manos y a la voz de “queremos el mercado”, decenas de productores y comerciantes anunciaban su rechazo a salir de la parroquia.
“Unamuncho nunca fue un mercado sino un centro de transferencia agroindustrial destinado para mayoristas, no pueden ir allá los medianos o pequeños. No hemos salido a confrontar”, agregó Maliza, ante una de las alternativas propuestas por el grupo de opositores.
“Merecemos un espacio digno para trabajar, el no contar con eso nos perjudica”, dijo María Torres, productora. (MAG)
CIFRA: 260 PRODUCTORES están catastrados como parte de la explaza Santa Clara y que ocuparán las instalaciones del remodelado espacio.
Hubo más propuestas
Según Julio Rodríguez, director de Planificación del Municipio de Ambato, se estudiaron más opciones para la ubicación de la nueva plaza.
Una de estas fue al costado izquierdo de Yacupamba, pero, por las redes de alta tensión en la zona no se puede elevar estructuras.
La cabecera norte del aeropuerto en Chachoán fue otra alternativa, pero, las circunstancias técnicas no fueron óptimas por la cercanía al relleno sanitario y la falta de acceso a servicios básicos.
Frente al aeropuerto y Quillán Loma fueron otras alternativas, pero ninguna cumplía con los requisitos técnicos para construir la plaza.
Municipio de Ambato definió espacio de construcción
El próximo viernes 4 de febrero, se llevará a efecto una nueva reunión para que las partes interesadas vuelvan a socializar el tema, aunque, por parte de la Municipalidad ya se tiene claro tanto el espacio, utilidad y tiempo de entrega del mismo.
Así lo indicó Julio Rodríguez, director de Planificación del Municipio de Ambato, quien sostuvo que luego de varias socializaciones y un total de seis propuestas de reubicación de los productores, finalmente el espacio más adecuado es Yacupamba, específicamente junto al motel de las Gaviotas.
“Unamuncho es un proyecto agroindustrial a escala mayorista, la reubicación de la nueva plaza es a menor escala, para un total de 260 productores catastrados”, sostuvo el funcionario.
Según Rodríguez Yacupamba fue aprobada en un 100% por los concejales que apoyaron el proyecto que llevó un análisis de ocho meses para ser presentado. “Todo está documentado”, aseguró.
Socializaciones
La decisión ha sido socializada, sostiene el funcionario que defiende la “potencialidad” del proyecto, pues al colindar con el Paso Lateral sería el único punto de acceso de los camiones, que no saldrán por la vía a Píllaro, y tampoco generarán congestión alguna en la parroquia.
Sino que contarán con una ruta de desfogue que no causará conflicto vehicular. Un total de 800 mil dólares es el costo de la obra que tendrá andenes de descarga, aparcamientos para camionetas de alquiler y bahías para carros particulares.
La antigua plaza de Santa Clara tenía 2 mil metros de área, hoy, el área será de 32 mil metros cuadrados.
Rodríguez ratificó que el remodelado espacio solo será ocupado por productores debidamente registrados, que son aproximadamente 260.
Entre 20 y 22 expropiaciones se planean realizar para que en cuatro meses la obra esté adecuada y entregada a los usuarios.