Es triste, pero hay muchas personas que no les importa acabar con la vida de un animal, ponen veneno en las calles sin piedad. Estos casos son muy comunes en la ciudad.
Es importante mantener la calma y actuar de inmediato. El tiempo es oro.
Primeros auxilios
- Si el perro está muy débil, casi desmayado o inconsciente debemos sacarle a una zona abierta, ventilada e iluminada. Para levantarlo hay que tener mucho cuidado, hay que sostener todo el cuerpo firmemente.
- Hay que retirar el veneno que veamos a la vista y guardar una muestra para que le sirva al veterinario.
- El veterinario indicará qué primeros auxilios podemos aplicar y cuáles no. Por ejemplo, una de las primeras acciones que debemos hacer es provocar el vómito, pero debemos saber que jamás debemos hacerlo si el perro está inconsciente o desmayado, ni si el veneno ingerido es un corrosivo.
- No debemos darle agua, comida, leche o aceite hasta que sepamos qué veneno ingirió. Cualquiera de estos remedios caseros podría tener un efecto contrario.
- Si se decide que debemos hacer vomitar al animal, debemos seguir unas pautas apropiadas para la inducción del vómito.
- Si la contaminación no se ha producido por ingestión, sino que se ha dado por vía tópica o cutánea, debemos sacudir el polvo con un cepillado intenso y realizar un baño de agua tibia. Si aun así no conseguimos retirar el tóxico de su pelo, debemos cortar ese trozo de pelo.
- Si la contaminación se da por contacto con las mucosas, la piel o los ojos deberemos lavar con abundante agua la zona afectada.
- Si el animal ya está despierto y algo menos aturdido, entonces será bueno darle de beber agua fresca, ya que muchos venenos de los que suelen ingerir los perros por accidente afectan a los riñones y el hígado y dándoles agua reduciremos el impacto en estos órganos. (APQ)
Provocar el vómito
- Con sal
Mezclar un vaso de agua con un par de cucharaditas de sal hasta lograr una solución homogénea y llenar con ella una jeringa.
Abrir la boca del perro y vaciarla rápidamente para que salga con presión. Esperar unos 10 o 15 minutos, y si no repetir la operación.
- Con agua oxigenada
Se deben utilizar dos mililitros de agua oxigenada por cada kilo de peso del perro. Ahora debes mezclar la dosis de agua oxigenada con la misma cantidad de agua y revolver hasta conseguir una solución homogénea. Vaciar el contenido de forma rápida con una jeringa en la garganta.