Rocío tiene 8 años de edad, y su mayor dificultad es la lectura y la relación con los números. Para ella la educación ha sido un verdadero calvario desde que se declaró la emergencia sanitaria.
Primero la suspensión de las clases presenciales cuando apenas estaba conociendo el mundo de las letras, luego las clases a través de internet a las que no podía acceder debido a que su madre, quien se dedica a la agricultura, no contaba con los dispositivos o los recursos.
Optó por las fichas pedagógicas que de vez en cuando sus profesores le hacían llegar. Su madre algo entendía de esos documentos y trataba de ayudarle, pero simplemente no era lo mismo.
Así terminó el segundo año de básica y aunque tenía todas las ganas de aprender a leer y escribir, no lo logró.
El nuevo año escolar
Llegó el nuevo año lectivo parecía que las cosas iban mejorando, las autoridades anunciaron el retorno progresivo a las aulas, pero nuevamente se suspendieron.
“Eso que no se cuenta cuando los profesores se enferman y no tienen reemplazo”, dijo la madre, al asegurar que son muchos los inconvenientes los que han tenido que enfrentar los estudiantes.
Como Rocío, cientos de niños y adolescentes presentan serias complicaciones en con su aprendizaje, por ello hay estudiantes que buscan regresar a las aulas.
“Es que ya no es solo una cuestión de convivencia, sino de una necesidad de alcanzar ciertos conocimientos”, dijo Malena S., de tercer año de bachillerato, quien busca profesores particulares para nivelarse.
Para la estudiante es necesario el retorno progresivo porque, al estar en último curso, necesitan tener más conocimientos para rendir las pruebas y cumplir sus sueños.
EL DATO El lunes 24 de enero se reanudaron las clases presenciales voluntarias.
Preocupación
Vinicio Aldaz, de la Corporación para la Calidad en Educación (Corpeducar), aseguró que lamentablemente los estudiantes presentan al menos tres años de retraso en el aprendizaje, lo cual se refleja en las diferentes evaluaciones desarrolladas por las instituciones educativas.
“Es un retraso pedagógico tanto en el sector particular y mucho más en las instituciones fiscales”, dijo al tiempo de asegurar que las consecuencias no solo se presentan en el ámbito pedagógico, sino también en la parte social y emocional.
Aldaz asegura que la enseñanza virtual frente a la presencial presenta un abismo, incluso en aquellas instituciones particulares que hacen inversiones fuertes para mejorar las herramientas virtuales.
“En el momento que se establecen las evaluaciones se evidencia que los retrasos son evidentes, a pesar de que (los estudiantes) sean promovidos al grado superior”, dijo.
Según el experto, ahora el reto está en que los docentes encuentren estrategias para llegar a los estudiantes y que sin tener que correr tratar de igualar este retraso pedagógico.
Además, indicó que es urgente el involucramiento de los padres de familia, el acompañamiento y la motivación para lograr un aprendizaje óptimo.
Profesores
Daniela Caiza, docente de bachillerato, manifestó que los vacíos no son solo pedagógicos sino también sociales, puesto que muchos adolescentes no entran a clases ni virtuales ni presenciales.
“Con esto de que el retorno es voluntario muchos no acuden a pesar de que estaban en el listado de retorno y no podemos decirles nada porque así está diseñado el plan”, dijo.
También mencionó que se siente impotente al ver que muchos jóvenes no cuentan con el conocimiento necesario para ser promovidos.
Jessica, es otra maestra de educación básica, quien indicó que su preocupación también se centra en que de los 34 alumnos de su clase, apenas 18 se conectan virtualmente a diario y ocho acuden presenciales, mientras que los demás siempre tienen alguna situación que no les permite recibir clases.
“Imagínese qué va a pasar cuando les toque regresar 100% presencial, ahí se va a evidenciar los vacíos en el aprendizaje y los que vamos a pasar mal seremos los profesores porque unos entenderán la materia otros no, como ya se ve en la actualidad”, dijo.
Autoridad
Ximena Loroña, coordinadora Zonal 3 del Ministerio de Educación, explicó que si bien existe un retraso en el aprendizaje, los docentes están preparados para realizar el seguimiento a los estudiantes.
Se ha propuesto el trabajo a través de los proyectos educativos, es decir que se desarrollan los conocimientos en torno a una estrategia para que se profundicen las destrezas.
“Es importante que los docentes entendamos que ya no es un estudio individualizado”, mencionó.
La funcionaria también recomendó a los padres de familia para que se pueda contar con el acompañamiento no solo físico, sino también emocional para que los niños absorban de mejor forma los contenidos. (FCT)