Pistas para encarar la nueva normalidad en la escuela

Entusiasmo. Las clases presenciales han sido beneficiosas para los niños.
Entusiasmo. Las clases presenciales han sido beneficiosas para los niños.

La evolución social nos expone a constantes renovaciones y cambios en todos los aspectos de la vida y nos exige buscar formas de adaptarnos a nuevas realidades, lo que es posible a través de la implementación de cambios en el cómo, cuándo y con qué hacerlo.

Si la crisis sanitaria generó caos en el mundo, pero esto es también la oportunidad para dar un giro radical en la educación de nuestro país.

Es necesario el cambio

Una renovación obligatoria, imprescindible con miras a una realidad educativa diferente, que sirva como un marco de referencia para el desarrollo de la educación en el marco contemporáneo de la cuarta revolución industrial.

Transformar para enfrentar los desafíos globales como desastres ambientales, problemas sociales, inseguridad, riesgos sanitarios, retos digitales y otros.

La nueva normalidad no solo se refiere a cambios y ajustes en lo personal, sino también en lo organizacional, institucional y estructural.

EL DATO:
La educación en la era pos-covid exige responder a los nuevos escenarios.

 

 

Algunas ideas a tener en cuenta

 

Resiliencia

Es la capacidad de recuperarse de la adversidad frente a una situación traumática, una pérdida o una catástrofe, saliendo fortalecido con mayores recursos, competencias y conexión emocional. Es un proceso activo, de resistencia, construcción y autoafirmación.

Esta es la primera capacidad que debemos potenciar para retomar la nueva forma de ser docentes. La resiliencia emocional va a permitir no solo superar las dificultades, sino  fortalecernos y aprender de cara a futuros retos.

Adaptación al cambio

Quien tenga la capacidad de adaptarse sobrevive, es la ley de la naturaleza. Las personas podemos potenciar nuestras capacidades para adaptarnos a nuevas circunstancias, creando y desarrollando soluciones a las situaciones que surgen. Esta capacidad nos permite avanzar y evolucionar como individuos y como sociedad.

 

Aprendizaje continuo

Es mantenerse en constante aprendizaje y desarrollo, es clave de la motivación. Reconocer que nos queda por aprender nos da la oportunidad de incorporar otras visiones que nos ayuden a sentirnos y ser mejores profesionales. La resistencia al cambio en el ámbito educativo, es imposible.

Ser flexibles

Es saber que no tenemos la verdad absoluta, escuchar sugerencias, recomendaciones, alternativas, opciones diferentes a las nuestras, quizá nos sorprendamos, pero seguro aprendemos. Nos permite diseñar experiencias de aprendizaje más allá del aula. Los salones de clase, tal y como los conocíamos, no volverán a ser los mismos.

 

Optimismo

La vida con optimismo y positivismo no significa dar la espalda a la realidad. Una actitud positiva y optimista ante las circunstancias duras, favorece la creatividad, te desinstalará de la queja improductiva y pone la mirada en un futuro mejor.

 

Empatía

No hay nada peor que el sentirse solo ante la incertidumbre. La empatía es una manera de conectar con el otro, hacerle saber que no está solo, que nos interesa como se siente.

Cuando los niños se sienten comprendidos y apoyados es más probable que permanezcan motivados y puedan conocerse a sí mismo. Es también una herramienta para entender la  causa de un comportamiento y enfrentar los desafíos.

Potencie su creatividad intuitiva, que le permite comprender y descubrir las realidades y necesidades del alumnado para atenderlo mejor.

 

Atención personalizada

Para ser guía que media los aprendizajes, considere la realidad integral del estudiante y le acompaña. Esté atento a cualquier señal de alerta en el comportamiento del estudiante.