En Píllaro no existe un museo público o planes concretos sobre la conservación de bienes arqueológicos o infraestructuras como el Qhapaq Ñan, esto a pesar de que posee tramos intactos este atractivo.
Píllaro es un cantón conocido por su cultura e historia, llena de colores, mitos, pero también por poseer riqueza arqueológica en algunas de sus parroquias, donde se pueden encontrar vasijas e incluso partes del Camino del Inca o también conocido como Qhapaq Ñan.
Un morador de Píllaro, que tiene una colección privada de piezas arqueológicas y que pidió que guarden su nombre en reserva, afirmó que desde niño le llamaron la atención los restos de vasijas y artefactos que se encontraba en el terreno de sus abuelos en la parte alta del cantón, aquí mientras hacían los huecos para el drenaje se hallaban con recipientes hechos de barro y hasta huesos en algunos casos.
“Yo era pequeño, en muchos casos se desecharon, se botaban a un lado para seguir con el trabajo, yo como niño de la curiosidad cogía y me contaban que era de los primeros pobladores de Píllaro”.
Cuando creció pudo comprender todo lo que representa este tipo de piezas y las fue conservando, incluso vecinos de otros sectores que saben que le gusta coleccionar restos arqueológicos lo llaman cuando encuentran algún tipo de artefacto.
“Es una forma de cuidar el legado del cantón, acá no hay un museo público para dejar estas piezas, así que mejor las conservó, a veces me llaman los vecinos que me ofrecen cosas que encontraron en su terreno o mientras construyen sus casas”, contó.
TOME NOTA Cosanga Píllaro es una de las culturas que habitó este territorio.
Qhapaq Ñan o Camino del Inca
Otro espacio arqueológico que tiene el cantón es el Camino del Inca o Qhapaq Ñan, aquí varios tramos se encuentran intactos, se puede decir que Píllaro tiene los tramos mejor conservados en Tungurahua.
Luis Lara, estudioso de la historia y arqueólogo, contó que de a poco se va perdiendo este camino, pues varias autoridades han pasado por la administración del cantón, pero nunca se ha hecho el intento por protegerlo o restaurarlo.
“El desconocimiento de los moradores del lugar, sobre este sendero antiguo, ha hecho que los pobladores vayan destruyendo, trabajando estas tierras donde está ubicado el patrimonio de este cantón, es necesario gestionar para que los presidentes barriales del lugar realicen mingas de mantenimiento para que no se termine perdiendo un legado que los pillareños tenemos y es una obligación cuidarlo”, comentó Lara.
Se estima que este camino tenía una extensión de más de 30 mil kilómetros que iban desde Colombia hasta el norte de Argentina y Chile, en lugares como el Cusco se han habilitado varios tramos y se aprovechan para el turismo comunitario.
“El cantón Píllaro es un lugar afortunado por contar con un tramo que está en perfecto estado entre unos 3 kilómetros, la parte alta hacia el oriente, tenemos ciertas evidencia que está intacto todavía este derrotero, pero que no está aprovechado para direccionar al pueblo que le gusta la aventura, el deporte y el turismo” , comentó Lara.
Noé Ramírez, concejal de Píllaro, y parte de la Comisión de Cultura, contó que se encuentran trabajando en una ordenanza sobre el patrimonio y su protección donde se espera incluir articulados que hablen de la preservación de estos espacios arqueológicos. (AVI)