Aunque la Organización Mundial de la Salud (OMS) no avala el uso de plasma de pacientes recuperados de Covid-19 para tratar a personas enfermas, la búsqueda de este derivado sanguíneo que podría salvar vidas es cada vez más frecuente.
La desesperación hace que familiares de la persona contagiada incluso paguen por el tipo de sangre que necesitan, es el caso de Marcelo R., quien estuvo a punto de comprar un pinta de sangre por el valor de mil 200 dólares, transacción que no se realizó porque su padre murió de covid antes de efectuar el negocio.
Necesidad
Luisa C., dijo que hace cuatro meses empezó una búsqueda de plasma para uno de sus abuelos, quien fue internado en una clínica debido a las complicaciones de salud que le produjo el Covid-19.
“Empecé averiguando con mis familiares y amigos cercanos, pero es un tema muy delicado porque muchas personas no quieren admitir que se contagiaron”, aseguró.
La búsqueda que realizó la llevó a un contacto en Guayaquil que le ofreció vender una pinta de sangre en 800 dólares, valor que estaba dispuesta a pagar.
“Estuvo cerca de viajar a Guayaquil, porque queríamos hacer todo allá, pero gracias a Dios mi abuelo empezó a mejorar con el tratamiento que le dieron y ya no fue necesario”, contó.
Tratamiento
En agosto del año anterior la OMS advirtió que la evidencia sobre la efectividad del tratamiento con plasma sigue siendo de «baja calidad», incluso cuando Estados Unidos emitió una autorización de emergencia para este tipo de terapias.
Estudios han revelado evidencias contradictorias respecto a esta terapia. Un estudio en China mostró que el plasma de personas que se recuperaron del coronavirus no logró marcar una diferencia en los pacientes hospitalizados, mientras que otro análisis conjunto mostró que puede reducir el riesgo de muerte.
Para el doctor Carlos Armijos, más allá de la eficacia del plasma, también existen riesgos potenciales de seguridad que deben ser examinados.
«Hay una serie de efectos secundarios que podrían ir desde fiebre hasta lesiones pulmonares graves o sobrecarga circulatoria”, dijo el galeno.
EL DATO
El año pasado en Estados Unidos se autorizó la ejecución de tratamientos con plasma.
Donación
Lorena Teaguaro, promotora del departamento de donación voluntaria de la Cruz Roja, dijo que la donación de sangre es un proceso voluntario y altruista, es decir, que los ciudadanos que la realizan no esperan recibir nada a cambio.
Así mismo mencionó que sí existen beneficios para los donantes, entre ellos consta la entrega de productos sanguíneos sin costo, el donante voluntario repetitivo tiene derecho a cinco productos sanguíneos para él, o para sus hijos menores de 17 años, así como también dos productos sanguíneos para sus padres mayores a 65 años, esto durante seis meses luego de su última donación.
Actualmente existe un déficit de sangre de entre el 70% y 80% en la Cruz Roja, por ende, solicitó a la ciudadanía que se acerque a donar en las instalaciones de la entidad. (RMC)