Integridad

A la fecha 30 de julio de dos mil diecinueve, viviendo una grave crisis política y económica, luego de haber pasado por un gobierno de más de diez años, dirigido por un puñado de corruptos, que robaban por falta de principios porque lo hacen desde cantidades pequeñas, hasta miles de millones de dólares, donde la mentira fue elevada a la categoría de verdad, como lo hacían los miembros de la corona de aquellos tiempos que no merecen recordar. Risible las palabras del cretino Rafa, cuando decía que se quemaba las manos por la honradez de su primo, que al otro día declaraba públicamente que había falsificado su título profesional, y así por el estilo, se declararon de manos limpias, cuando en sus entrañas, pensaban que eran todo lo contrario; en fin a fuerza de las armas y de todo el poder que tenía a la mano el innombrable de la década pasada, hizo fraude electoral, y cambio los resultados en poco menos de dos horas, declarando a vista y paciencia de todos los ciudadanos que había nuevo presidente. Los romanos gritaban larga vida al nuevo Rey, cuando lo coronaban a su nuevo patrón y verdugo; la mayoría pensaba que el nuevo rey en Ecuador, tenía la integridad suficiente para cambiar el destino del país, con las falsas ofertas de casas, trabajo y las mismas mentiras de siempre; oh sorpresa, cuando presentó su nuevo gabinete, las mismas caras de siempre, los mismos pillos, que ahora, aprovechando el susto y hambre de las personas, han robado sin piedad los dineros destinados a hospitales, medicinas e insumos médicos para el control de la pandemia, se sumaron al festín miserables de otros partidos, que han regresado del exilio en busca de fortuna mal habida.

Es lamentable ver con dolor, cómo pueden existir personas sin escrúpulos, sin valores; estos ladrones han ganado no solamente dinero, se han ganado el estigma de la infamia, quedarán marcados para siempre, en su frente como crueles ladrones; ahora toca buscar bien al candidato, no tenemos el derecho a equivocarnos, esta vez debemos elegir a un estadista con sentido patriótico que tenga una sola condición, integridad.

Joffre Daza Quiñónez

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