Juan Sebastián Vargas
Hace unos meses escribí sobre el joven presidente de El Salvador Nayib Bukele y el reto que asumía para enfrentar la crisis de violencia que desangra al pequeño país centroamericano, pues siempre me ha llamado la atención los líderes jóvenes en todo aspecto y hoy no quiero dejar de pasar en alto el caso de Sanna Marin quien con tan solo 34 años ha sido elegida Primera Ministra de Finlandia, convirtiéndose en la más joven del mundo en este cargo actualmente, de tendencia socialdemócrata y con una maestría en administración pública tiene el gran reto de liderar uno de los países mas desarrollados del mundo, criada por su madre en una familia homoparental cosa que puede chocar a cualquier conservador y que “no le ha provocado ningún trauma o complejo”, a tal punto que actualmente vive con su esposo y es madre de un niño lo que demuestra el reflejo de una sociedad totalmente tolerante, describe a su juventud como cotidiana y sin abundancia material, la política siempre le pareció ajena y la vida le llevó a liderar una coalición de cinco partidos todos dirigidos por mujeres, de hecho Finlandia está a la vanguardia del feminismo, Sanna Marin justamente está ubicada en el ala izquierda de la política finlandesa (correístas no se emocionen, en Finlandia no le cantan al Che Guevara) salió vencedora por una votación interna y su principal objetivo al parecer es recuperar la confianza luego de una crisis política que sucedió en el país nórdico que le obligó a renunciar al anterior primer ministro, claro, estas crisis no se comparan a las de nuestros países que las solucionamos con violencia, en una reciente entrevista manifestó que; «vengo de una familia con pocos recursos y yo no hubiera tenido posibilidades de tener éxito y progresar si no tuviéramos un sólido estado de bienestar y un buen sistema educativo», ahí se resume justamente la diferencia con los países de tercer mundo, en resumen este tipo de líderes son ejemplares, es más este sí es un verdadero ejemplo de feminismo, hay otros líderes jóvenes exitosos como Sebastián Kurz de 33 años que se desempeñó como Canciller de Austria, esto solo nos demuestra que los ‘millennials’ ya están llegando al poder.
Juan Sebastián Vargas
Hace unos meses escribí sobre el joven presidente de El Salvador Nayib Bukele y el reto que asumía para enfrentar la crisis de violencia que desangra al pequeño país centroamericano, pues siempre me ha llamado la atención los líderes jóvenes en todo aspecto y hoy no quiero dejar de pasar en alto el caso de Sanna Marin quien con tan solo 34 años ha sido elegida Primera Ministra de Finlandia, convirtiéndose en la más joven del mundo en este cargo actualmente, de tendencia socialdemócrata y con una maestría en administración pública tiene el gran reto de liderar uno de los países mas desarrollados del mundo, criada por su madre en una familia homoparental cosa que puede chocar a cualquier conservador y que “no le ha provocado ningún trauma o complejo”, a tal punto que actualmente vive con su esposo y es madre de un niño lo que demuestra el reflejo de una sociedad totalmente tolerante, describe a su juventud como cotidiana y sin abundancia material, la política siempre le pareció ajena y la vida le llevó a liderar una coalición de cinco partidos todos dirigidos por mujeres, de hecho Finlandia está a la vanguardia del feminismo, Sanna Marin justamente está ubicada en el ala izquierda de la política finlandesa (correístas no se emocionen, en Finlandia no le cantan al Che Guevara) salió vencedora por una votación interna y su principal objetivo al parecer es recuperar la confianza luego de una crisis política que sucedió en el país nórdico que le obligó a renunciar al anterior primer ministro, claro, estas crisis no se comparan a las de nuestros países que las solucionamos con violencia, en una reciente entrevista manifestó que; «vengo de una familia con pocos recursos y yo no hubiera tenido posibilidades de tener éxito y progresar si no tuviéramos un sólido estado de bienestar y un buen sistema educativo», ahí se resume justamente la diferencia con los países de tercer mundo, en resumen este tipo de líderes son ejemplares, es más este sí es un verdadero ejemplo de feminismo, hay otros líderes jóvenes exitosos como Sebastián Kurz de 33 años que se desempeñó como Canciller de Austria, esto solo nos demuestra que los ‘millennials’ ya están llegando al poder.
Juan Sebastián Vargas
Hace unos meses escribí sobre el joven presidente de El Salvador Nayib Bukele y el reto que asumía para enfrentar la crisis de violencia que desangra al pequeño país centroamericano, pues siempre me ha llamado la atención los líderes jóvenes en todo aspecto y hoy no quiero dejar de pasar en alto el caso de Sanna Marin quien con tan solo 34 años ha sido elegida Primera Ministra de Finlandia, convirtiéndose en la más joven del mundo en este cargo actualmente, de tendencia socialdemócrata y con una maestría en administración pública tiene el gran reto de liderar uno de los países mas desarrollados del mundo, criada por su madre en una familia homoparental cosa que puede chocar a cualquier conservador y que “no le ha provocado ningún trauma o complejo”, a tal punto que actualmente vive con su esposo y es madre de un niño lo que demuestra el reflejo de una sociedad totalmente tolerante, describe a su juventud como cotidiana y sin abundancia material, la política siempre le pareció ajena y la vida le llevó a liderar una coalición de cinco partidos todos dirigidos por mujeres, de hecho Finlandia está a la vanguardia del feminismo, Sanna Marin justamente está ubicada en el ala izquierda de la política finlandesa (correístas no se emocionen, en Finlandia no le cantan al Che Guevara) salió vencedora por una votación interna y su principal objetivo al parecer es recuperar la confianza luego de una crisis política que sucedió en el país nórdico que le obligó a renunciar al anterior primer ministro, claro, estas crisis no se comparan a las de nuestros países que las solucionamos con violencia, en una reciente entrevista manifestó que; «vengo de una familia con pocos recursos y yo no hubiera tenido posibilidades de tener éxito y progresar si no tuviéramos un sólido estado de bienestar y un buen sistema educativo», ahí se resume justamente la diferencia con los países de tercer mundo, en resumen este tipo de líderes son ejemplares, es más este sí es un verdadero ejemplo de feminismo, hay otros líderes jóvenes exitosos como Sebastián Kurz de 33 años que se desempeñó como Canciller de Austria, esto solo nos demuestra que los ‘millennials’ ya están llegando al poder.
Juan Sebastián Vargas
Hace unos meses escribí sobre el joven presidente de El Salvador Nayib Bukele y el reto que asumía para enfrentar la crisis de violencia que desangra al pequeño país centroamericano, pues siempre me ha llamado la atención los líderes jóvenes en todo aspecto y hoy no quiero dejar de pasar en alto el caso de Sanna Marin quien con tan solo 34 años ha sido elegida Primera Ministra de Finlandia, convirtiéndose en la más joven del mundo en este cargo actualmente, de tendencia socialdemócrata y con una maestría en administración pública tiene el gran reto de liderar uno de los países mas desarrollados del mundo, criada por su madre en una familia homoparental cosa que puede chocar a cualquier conservador y que “no le ha provocado ningún trauma o complejo”, a tal punto que actualmente vive con su esposo y es madre de un niño lo que demuestra el reflejo de una sociedad totalmente tolerante, describe a su juventud como cotidiana y sin abundancia material, la política siempre le pareció ajena y la vida le llevó a liderar una coalición de cinco partidos todos dirigidos por mujeres, de hecho Finlandia está a la vanguardia del feminismo, Sanna Marin justamente está ubicada en el ala izquierda de la política finlandesa (correístas no se emocionen, en Finlandia no le cantan al Che Guevara) salió vencedora por una votación interna y su principal objetivo al parecer es recuperar la confianza luego de una crisis política que sucedió en el país nórdico que le obligó a renunciar al anterior primer ministro, claro, estas crisis no se comparan a las de nuestros países que las solucionamos con violencia, en una reciente entrevista manifestó que; «vengo de una familia con pocos recursos y yo no hubiera tenido posibilidades de tener éxito y progresar si no tuviéramos un sólido estado de bienestar y un buen sistema educativo», ahí se resume justamente la diferencia con los países de tercer mundo, en resumen este tipo de líderes son ejemplares, es más este sí es un verdadero ejemplo de feminismo, hay otros líderes jóvenes exitosos como Sebastián Kurz de 33 años que se desempeñó como Canciller de Austria, esto solo nos demuestra que los ‘millennials’ ya están llegando al poder.