Entregaban droga a domicilio

APREHENSIÓN. Miembros de varias unidades de la Policía Nacional allanaron un inmueble al sur de la ciudad.
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APREHENSIÓN. Miembros de varias unidades de la Policía Nacional allanaron un inmueble al sur de la ciudad.
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APREHENSIÓN. Miembros de varias unidades de la Policía Nacional allanaron un inmueble al sur de la ciudad.

‘Las Obdulias’ es así como la Policía Nacional con su Unidad de Antinarcóticos de Tungurahua calificó a la organización desarticulada la madrugada de ayer, en la que detuvieron a seis personas (cuatro hombres y dos mujeres) dedicada al microtráfico en Ambato.

El coronel Rommel Navarrete, jefe del Comando de Policía de Tungurahua, dijo que el operativo ‘Victoria 408’ ha sido calificado en la ciudad como ‘Cruzada’ en el que interactuaron varias unidades de Policía encabezadas por Antinarcóticos.

Operativo

El operativo se ejecutó a las 02:22 de la madrugada de ayer en coordinación de la Fiscalía de Tungurahua y después de tres meses de haberse abierto esta investigación previa con seguimientos y videos se logró desarticular la organización.

Navarrete explicó que el allanamiento se lo hizo sobre las calles Tres Carabelas y Sucumbíos, en el sector de Letamendi, en una casa denominada como centro de acopio de sustancias ilícitas o sujetas a fiscalización.

“En la indagación se recogieron varias pruebas de convicción que permitieron comprobar fehacientemente la participación de los hoy investigados”, aclaró Navarrete.

Además, el Coronel dijo que el nombre de ‘Las Obdulias’ nace porque la líder de esta organización tiene el nombre de Obdulia del Pilar R., mientras que su hermana Joselyn R., actuaba como su compinche.

Para despistar a la Policía Nacional ellos contaban con un guardia o campanero, rol que lo cumplía Marcelo P., mientras que los expendedores del alcaloide eran Dennis T., Iván P. y Erick M., quienes se desplazaban hasta los domicilios donde era requerida la droga, esto bajo pedido.

“Se trata de un clan familiar que se encargaba de cumplir diferentes roles como es la venta de la droga, en el sur de la ciudad y en los alrededores de los parques 12 de Noviembre y Cevallos”, aseveró Navarrete.

El uniformado, además, aclaró que ellos fueron denunciados a través del 1800 DROGAS (37 64 27), lo que permitió ‘atar cabos’ para su captura.

Entre las cosas decomisadas están 197,5 gramos de cocaína y 1,8 gramos de marihuana, como también dos celulares y 640 dólares en efectivo que serían producto de la venta de los estupefacientes.

“Con aquello se impidió que 1.970 dosis de cocaína y 3,6 de marihuana sean manufacturadas y expendidas en la ciudad, evitando de esta manera que la comunidad se vea afectada por otros delitos que conllevan el consumo de estas sustancias”, afirmó el Coronel.

Modus Operandi

El mayor Javier Castro, jefe de la Unidad de Antinarcóticos de Tungurahua, dijo que este hecho delictivo se lo hacía a través de una organización familiar dedicada al tráfico interno de sustancias ilícitas.

“Los consumidores llegaban al inmueble en la Letamendi a golpear la puerta para que les vendan la droga, en esta existía una ventana por donde se daba el cruce de manos entre el expendedor y el cliente”, aclaró Castro.

El Capitán manifestó que esta organización contaba con una motocicleta con la que en horas de la madrugada se realizaba la entrega a domicilio desde la media noche hasta las 03:00.

“Afuera existía un hombre que les brindaba seguridad, con el fin de que al ver a la Policía Nacional les informara para esconderse o escapar de los uniformados, pero esta vez se les ‘durmió el diablo’ y tras un operativo fueron capturados”, dijo Castro.

Todos los detenidos estaban en el interior de la vivienda. A la llegada de los uniformados, uno de los sospechosos subió a la terraza y arrojó el alcaloide a un terreno baldío, pero más droga se incautó dentro del departamento la que fue visualizada por el Fiscal de turno.

Con estas pruebas ellos fueron privados de su libertad y trasladados hasta la Unidad de Aseguramiento Transitorio de la Unidad de Vigilancia Comunitaria hasta la hora de la audiencia de flagrancia. (EV)

‘Las Obdulias’ es así como la Policía Nacional con su Unidad de Antinarcóticos de Tungurahua calificó a la organización desarticulada la madrugada de ayer, en la que detuvieron a seis personas (cuatro hombres y dos mujeres) dedicada al microtráfico en Ambato.

El coronel Rommel Navarrete, jefe del Comando de Policía de Tungurahua, dijo que el operativo ‘Victoria 408’ ha sido calificado en la ciudad como ‘Cruzada’ en el que interactuaron varias unidades de Policía encabezadas por Antinarcóticos.

Operativo

El operativo se ejecutó a las 02:22 de la madrugada de ayer en coordinación de la Fiscalía de Tungurahua y después de tres meses de haberse abierto esta investigación previa con seguimientos y videos se logró desarticular la organización.

Navarrete explicó que el allanamiento se lo hizo sobre las calles Tres Carabelas y Sucumbíos, en el sector de Letamendi, en una casa denominada como centro de acopio de sustancias ilícitas o sujetas a fiscalización.

“En la indagación se recogieron varias pruebas de convicción que permitieron comprobar fehacientemente la participación de los hoy investigados”, aclaró Navarrete.

Además, el Coronel dijo que el nombre de ‘Las Obdulias’ nace porque la líder de esta organización tiene el nombre de Obdulia del Pilar R., mientras que su hermana Joselyn R., actuaba como su compinche.

Para despistar a la Policía Nacional ellos contaban con un guardia o campanero, rol que lo cumplía Marcelo P., mientras que los expendedores del alcaloide eran Dennis T., Iván P. y Erick M., quienes se desplazaban hasta los domicilios donde era requerida la droga, esto bajo pedido.

“Se trata de un clan familiar que se encargaba de cumplir diferentes roles como es la venta de la droga, en el sur de la ciudad y en los alrededores de los parques 12 de Noviembre y Cevallos”, aseveró Navarrete.

El uniformado, además, aclaró que ellos fueron denunciados a través del 1800 DROGAS (37 64 27), lo que permitió ‘atar cabos’ para su captura.

Entre las cosas decomisadas están 197,5 gramos de cocaína y 1,8 gramos de marihuana, como también dos celulares y 640 dólares en efectivo que serían producto de la venta de los estupefacientes.

“Con aquello se impidió que 1.970 dosis de cocaína y 3,6 de marihuana sean manufacturadas y expendidas en la ciudad, evitando de esta manera que la comunidad se vea afectada por otros delitos que conllevan el consumo de estas sustancias”, afirmó el Coronel.

Modus Operandi

El mayor Javier Castro, jefe de la Unidad de Antinarcóticos de Tungurahua, dijo que este hecho delictivo se lo hacía a través de una organización familiar dedicada al tráfico interno de sustancias ilícitas.

“Los consumidores llegaban al inmueble en la Letamendi a golpear la puerta para que les vendan la droga, en esta existía una ventana por donde se daba el cruce de manos entre el expendedor y el cliente”, aclaró Castro.

El Capitán manifestó que esta organización contaba con una motocicleta con la que en horas de la madrugada se realizaba la entrega a domicilio desde la media noche hasta las 03:00.

“Afuera existía un hombre que les brindaba seguridad, con el fin de que al ver a la Policía Nacional les informara para esconderse o escapar de los uniformados, pero esta vez se les ‘durmió el diablo’ y tras un operativo fueron capturados”, dijo Castro.

Todos los detenidos estaban en el interior de la vivienda. A la llegada de los uniformados, uno de los sospechosos subió a la terraza y arrojó el alcaloide a un terreno baldío, pero más droga se incautó dentro del departamento la que fue visualizada por el Fiscal de turno.

Con estas pruebas ellos fueron privados de su libertad y trasladados hasta la Unidad de Aseguramiento Transitorio de la Unidad de Vigilancia Comunitaria hasta la hora de la audiencia de flagrancia. (EV)

‘Las Obdulias’ es así como la Policía Nacional con su Unidad de Antinarcóticos de Tungurahua calificó a la organización desarticulada la madrugada de ayer, en la que detuvieron a seis personas (cuatro hombres y dos mujeres) dedicada al microtráfico en Ambato.

El coronel Rommel Navarrete, jefe del Comando de Policía de Tungurahua, dijo que el operativo ‘Victoria 408’ ha sido calificado en la ciudad como ‘Cruzada’ en el que interactuaron varias unidades de Policía encabezadas por Antinarcóticos.

Operativo

El operativo se ejecutó a las 02:22 de la madrugada de ayer en coordinación de la Fiscalía de Tungurahua y después de tres meses de haberse abierto esta investigación previa con seguimientos y videos se logró desarticular la organización.

Navarrete explicó que el allanamiento se lo hizo sobre las calles Tres Carabelas y Sucumbíos, en el sector de Letamendi, en una casa denominada como centro de acopio de sustancias ilícitas o sujetas a fiscalización.

“En la indagación se recogieron varias pruebas de convicción que permitieron comprobar fehacientemente la participación de los hoy investigados”, aclaró Navarrete.

Además, el Coronel dijo que el nombre de ‘Las Obdulias’ nace porque la líder de esta organización tiene el nombre de Obdulia del Pilar R., mientras que su hermana Joselyn R., actuaba como su compinche.

Para despistar a la Policía Nacional ellos contaban con un guardia o campanero, rol que lo cumplía Marcelo P., mientras que los expendedores del alcaloide eran Dennis T., Iván P. y Erick M., quienes se desplazaban hasta los domicilios donde era requerida la droga, esto bajo pedido.

“Se trata de un clan familiar que se encargaba de cumplir diferentes roles como es la venta de la droga, en el sur de la ciudad y en los alrededores de los parques 12 de Noviembre y Cevallos”, aseveró Navarrete.

El uniformado, además, aclaró que ellos fueron denunciados a través del 1800 DROGAS (37 64 27), lo que permitió ‘atar cabos’ para su captura.

Entre las cosas decomisadas están 197,5 gramos de cocaína y 1,8 gramos de marihuana, como también dos celulares y 640 dólares en efectivo que serían producto de la venta de los estupefacientes.

“Con aquello se impidió que 1.970 dosis de cocaína y 3,6 de marihuana sean manufacturadas y expendidas en la ciudad, evitando de esta manera que la comunidad se vea afectada por otros delitos que conllevan el consumo de estas sustancias”, afirmó el Coronel.

Modus Operandi

El mayor Javier Castro, jefe de la Unidad de Antinarcóticos de Tungurahua, dijo que este hecho delictivo se lo hacía a través de una organización familiar dedicada al tráfico interno de sustancias ilícitas.

“Los consumidores llegaban al inmueble en la Letamendi a golpear la puerta para que les vendan la droga, en esta existía una ventana por donde se daba el cruce de manos entre el expendedor y el cliente”, aclaró Castro.

El Capitán manifestó que esta organización contaba con una motocicleta con la que en horas de la madrugada se realizaba la entrega a domicilio desde la media noche hasta las 03:00.

“Afuera existía un hombre que les brindaba seguridad, con el fin de que al ver a la Policía Nacional les informara para esconderse o escapar de los uniformados, pero esta vez se les ‘durmió el diablo’ y tras un operativo fueron capturados”, dijo Castro.

Todos los detenidos estaban en el interior de la vivienda. A la llegada de los uniformados, uno de los sospechosos subió a la terraza y arrojó el alcaloide a un terreno baldío, pero más droga se incautó dentro del departamento la que fue visualizada por el Fiscal de turno.

Con estas pruebas ellos fueron privados de su libertad y trasladados hasta la Unidad de Aseguramiento Transitorio de la Unidad de Vigilancia Comunitaria hasta la hora de la audiencia de flagrancia. (EV)

‘Las Obdulias’ es así como la Policía Nacional con su Unidad de Antinarcóticos de Tungurahua calificó a la organización desarticulada la madrugada de ayer, en la que detuvieron a seis personas (cuatro hombres y dos mujeres) dedicada al microtráfico en Ambato.

El coronel Rommel Navarrete, jefe del Comando de Policía de Tungurahua, dijo que el operativo ‘Victoria 408’ ha sido calificado en la ciudad como ‘Cruzada’ en el que interactuaron varias unidades de Policía encabezadas por Antinarcóticos.

Operativo

El operativo se ejecutó a las 02:22 de la madrugada de ayer en coordinación de la Fiscalía de Tungurahua y después de tres meses de haberse abierto esta investigación previa con seguimientos y videos se logró desarticular la organización.

Navarrete explicó que el allanamiento se lo hizo sobre las calles Tres Carabelas y Sucumbíos, en el sector de Letamendi, en una casa denominada como centro de acopio de sustancias ilícitas o sujetas a fiscalización.

“En la indagación se recogieron varias pruebas de convicción que permitieron comprobar fehacientemente la participación de los hoy investigados”, aclaró Navarrete.

Además, el Coronel dijo que el nombre de ‘Las Obdulias’ nace porque la líder de esta organización tiene el nombre de Obdulia del Pilar R., mientras que su hermana Joselyn R., actuaba como su compinche.

Para despistar a la Policía Nacional ellos contaban con un guardia o campanero, rol que lo cumplía Marcelo P., mientras que los expendedores del alcaloide eran Dennis T., Iván P. y Erick M., quienes se desplazaban hasta los domicilios donde era requerida la droga, esto bajo pedido.

“Se trata de un clan familiar que se encargaba de cumplir diferentes roles como es la venta de la droga, en el sur de la ciudad y en los alrededores de los parques 12 de Noviembre y Cevallos”, aseveró Navarrete.

El uniformado, además, aclaró que ellos fueron denunciados a través del 1800 DROGAS (37 64 27), lo que permitió ‘atar cabos’ para su captura.

Entre las cosas decomisadas están 197,5 gramos de cocaína y 1,8 gramos de marihuana, como también dos celulares y 640 dólares en efectivo que serían producto de la venta de los estupefacientes.

“Con aquello se impidió que 1.970 dosis de cocaína y 3,6 de marihuana sean manufacturadas y expendidas en la ciudad, evitando de esta manera que la comunidad se vea afectada por otros delitos que conllevan el consumo de estas sustancias”, afirmó el Coronel.

Modus Operandi

El mayor Javier Castro, jefe de la Unidad de Antinarcóticos de Tungurahua, dijo que este hecho delictivo se lo hacía a través de una organización familiar dedicada al tráfico interno de sustancias ilícitas.

“Los consumidores llegaban al inmueble en la Letamendi a golpear la puerta para que les vendan la droga, en esta existía una ventana por donde se daba el cruce de manos entre el expendedor y el cliente”, aclaró Castro.

El Capitán manifestó que esta organización contaba con una motocicleta con la que en horas de la madrugada se realizaba la entrega a domicilio desde la media noche hasta las 03:00.

“Afuera existía un hombre que les brindaba seguridad, con el fin de que al ver a la Policía Nacional les informara para esconderse o escapar de los uniformados, pero esta vez se les ‘durmió el diablo’ y tras un operativo fueron capturados”, dijo Castro.

Todos los detenidos estaban en el interior de la vivienda. A la llegada de los uniformados, uno de los sospechosos subió a la terraza y arrojó el alcaloide a un terreno baldío, pero más droga se incautó dentro del departamento la que fue visualizada por el Fiscal de turno.

Con estas pruebas ellos fueron privados de su libertad y trasladados hasta la Unidad de Aseguramiento Transitorio de la Unidad de Vigilancia Comunitaria hasta la hora de la audiencia de flagrancia. (EV)