Camales clandestinos preocupan en Tungurahua

Evidencias. En los controles encuentran sitios insalubres e inadecuados de faenamiento.
Evidencias. En los controles encuentran sitios insalubres e inadecuados de faenamiento.

Como cada día Marlene Chasi, moradora de Tisaleo, compra la carne en uno de los frigoríficos de este cantón, ella asegura que la carne es considerada uno de los alimentos más exquisitos y nutritivos que no puede faltar en su mesa, más aún cuando se trata de alimentar a la familia e incluso a sus trabajadores.

Sin embargo, al consultarle si conoce cómo se procesa o cómo se faena a los animales para obtener esta carne, ella asegura que no sabe, pues en Tisaleo no ha visto un lugar autorizado para esta labor.

Realidad

Según datos de la Agencia Ecuatoriana de Aseguramiento de Calidad del Agro (Agrocalidad) en lo que va del año se han clausurado cuatro camales clandestinos ubicados en Pelileo, Ambato y Tisaleo.

Agrocalidad, además, asegura que en los camales clandestinos se encuentran despojos de bovinos faenados, por lo que se procede a clausurararlos, ya que no existen las garantías estipuladas por un médico veterinario, quien es el único que garantiza la inocuidad alimentaria.

Para Rosa Arévalo, moradora de Pelileo, es un secreto a voces el que en varios frigoríficos faenan ellos mismos a los animales, sin saber si los mismos son sanos o tienen alguna enfermedad.

“Pelan de forma tradicional, artesanal a los animales, ya sean chanchos, ovejas o ganado vacuno”, dijo.

Javier Rodríguez, técnico de inocuidad de los alimentos de Agrocalidad en Tungurahua, manifestó que los controles se realizan continuamente a estos lugares de faenamiento no autorizados que son calificados como camales clandestinos, sin embargo, se requiere que la ciudadanía denuncie estos sitios, ya que es a partir de ello que se puede proceder a la clausura de los establecimientos.

Certificación

Rodríguez explicó que es importante que estos sitios de faenamiento sean autorizados y certificados, ya que para ello deben cumplir ciertos requisitos, uno, y talvez el principal, es que deben contar con el asesoramiento técnico veterinario.

El técnico aseguró que la responsabilidad del médico veterinario es verificar el ingreso de los animales, realizar una inspección antemorten, es decir que los animales estén sanos, sin enfermedades, luego el proceso de faenamiento debe tener buenas prácticas de manejo y finalmente verificar el proceso posmorten, lo cual garantiza que el producto que sale de ahí es apto para el consumo humano.

“Lo que no pasa en los establecimientos clandestinos que no sabemos qué tipo de animales ingresan a este tipo de faenamientos, por lo que no hay inspección ni antes, ni durante, ni después del proceso”, dijo. (FCT)

Tome nota

Si las personas conocen de camales clandestinos pueden denunciarlos llamando al 032 585 223.

Camales autorizados

En Tungurahua existen 48 camales catastrados, de los cuales nueve están con certificación, nueve solo con autorización, nueve con habilitación suspendida y 20 camales de aves certificados.